Seguridad pide regular venta de licor y ‘parar la fiesta’
››Como bares están cerrados, gente se enfiesta en sus casas, dice michael Soto
Municipios alegan imposibilidad legal de declarar ley seca ante la pandemia
“Es momento de parar la fiesta”. Con esas palabras, el ministro de Seguridad Pública, Michael Soto, hizo un llamado a la población para frenar actividades que impliquen aglomeraciones y con especial énfasis aquellas donde hay ingesta de licor.
Las declaraciones la dio el jerarca este sábado, luego de conocerse que el país elevó a 7.231 los casos de contagios con 386 nuevas infecciones y 28 fallecimientos. (Ver nota en página 9A).
Ante este escenario, Soto, incluso, solicitó a consejos municipales y alcaldías a poner límite a la venta de licor, y evitar que la gente se reúna fuera de supermercados, pulperías o licoreras, donde han detectado grupos consumiendo, aparte de las celebraciones en viviendas.
“Como los bares están cerrados, la gente se está aglomerando, y también estamos viendo que hay gente que compra licor y hace fiestas en la casa”, expresó.
Aparte de agrupar gente, lo cual violenta las medidas de distanciamiento social y rompe las burbujas sociales, el otro problema es que las personas se ponen violentas, según comentó Soto. Citó el caso de un hombre que bajo los efectos del licor mató a su hermano, días atrás.
“Se han puesto violentos con la Policía. Es responsabilidad absolutamente de todos el cuidarnos los unos a los otros. Fiestas en fines de semana o actividades sociales en casas de habitación siguen constantes y eso demanda actividad de la Policía. Ya llegó el momento de parar la fiesta, la situación es complicada, es difícil y todos debemos procurar la salud individual y colectiva”, recalcó el ministro.
Pese a la solicitud del jerarca, Karen Porras, directora de la Unión Nacional de Gobiernos Locales (UNGL), descartó la posibilidad de regular la venta, porque “no tienen las posibilidades legales”.
Según Porras, el tema fue discutido el viernes por el presidente de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), Alexánder Solís, con 120 autoridades locales, en una reunión convocada a solicitud de la Asociación Nacional de Alcaldías e Intendencias (ANAI) y el Instituto de Fomento y Asesoría Municipal (IFAM).
Explicó que el problema está en que la Ley de regulación y comercialización de bebidas con contenido alcohólico (9047) no incluye la pandemia como uno de los escenarios en los que se podrían actuar.
“Ya les hemos dicho a las autoridades que se requiere o que se incluya dentro del decreto de emergencia nacional la competencia de los ayuntamientos para la regulación en estos momentos de pandemia, o que se modifique la ley 9047, porque en la actualidad las municipalidades carecen de la competencia legal para aplicar la ley seca”, expresó Porras.
Por eso comentó que le sorprendieron las manifestaciones del ministro Soto.
Juan Pablo Barquero, presidente de la UNGL, aseguró que las municipalidades están anuentes a colaborar con el gobierno, pero la ley lo impide.
“En este momento, lamentablemente no estamos amparados ante la ley para poder tomar una consideración de esa naturaleza. Le indicamos a las autoridades que si en realidad consideran necesario en este momento que se actúe en esos parámetros, que se determine claramente con un lineamiento nacional el establecimiento de esta normativa en cada una de las municipalidades de este país”, coincidió.
El artículo 26 de la ley 9047 señala que “cada municipalidad tendrá la facultad de regular la comercialización de bebidas alcohólicas y consumo de licor, los días que se celebren actos cívicos, desfiles u otras actividades cantonales, en la ruta asignada, y podrá delimitar el radio de acción”.
El ministro de Seguridad también pidió abiertamente a la población a seguir denunciando las fiestas o reuniones.
Para esa solicitud, utilizó una frase que dijo haber visto en redes y que le pareció muy oportuna: “fiesta que veo, fiesta que sapeo”.
Tanto Soto como Rodrigo Marín, director de Vigilancia de la Salud, insistieron en su llamado a respetar las restricciones y evitar la movilización según la estrategia de martillo, anunciada el viernes por el gobierno.
La medida aplica principalmente para la Gran Área Metropolitana (GAM) que tiene en este momento los principales focos de contagio. Precisamente, la intención es frenar la transmisión para volver a encontrarle el rastro del virus.
Específicamente, se elevó el nivel de alerta naranja para todos los cantones de la GAM con la idea de establecer un “cerco sanitario” y reducir la movilización de la gente.
Entre las disposiciones están: cierre de establecimientos no esenciales, ampliación de la restricción vehicular y reducción al 20% del transporte público.
“FIESTAS En FINES DE SEMANA o ACTIVIDADES SOCIALES En CASAS DE HABITACIÓN Siguen CONSTANTES, FUERTES Y ESO DEMANDA ACTIVIDAD DE LA POLICÍA. YA LLEGÓ EL momento DE PARAR LA FIESTA, LA SITUACIÓN ES COMPLICADA, ES DIFÍCIL Y TODOS DEBEMOS PROCURAR LA SALUD individual Y COLECTIVA”. Michael Soto ministro
“YA LES HEMOS DICHO A LAS AUTORIDADES QUE SE REQUIERE o QUE SE INCLUYA DENTRO DEL DECRETO DE EMERGENCIA nacional LA COMPETENCIA DE LAS MUNICIPALIDADES PARA LA REGULACIÓN En ESTOS momentos DE PANDEMIA. o QUE SE modifique LA LEY 9047, PORQUE En ESTE momento LAS MUNICIPALIDADES CARECEN DE LA COMPETENCIA LEGAL PARA APLICAR LEY SECA”. Karen Porras ungl