Ticas varadas en epicentro del coronavirus alzan la voz
Universitarias reclaman lentitud de embajada y falta de asistencia
Encerradas en sus apartamentos, dos estudiantes ticas hacen todo lo posible por sobrellevar la difícil tarea de vivir en Wuhan, China, la ciudad en cuarentena por el coronavirus.
Ya no están optimistas de un posible rescate por parte del gobierno de Costa Rica. Las promesas que llegaron desde el consulado costarricense en Pekín aún no se concretan, mientras que Paola Reyes Pérez y María Belisa Torres Pérez observan cómo las demás naciones evacuan a sus ciudadanos, en una metrópoli completamente cerrada por las autoridades chinas en un intento de frenar el avance de este mal.
El plan inicial de Costa Rica era sacarlas por tierra en un auto particular a otra ciudad china, para que ahí cumplieran una cuarentena de 14 días. Luego, llevarlas por aire a un tercer país, donde debían tener otro periodo de aislamiento adicional. Todo se derrumbó cuando Pekín denegó las autorizaciones para rescates terrestres.
Entonces, la vía aérea parece ser la única salida, pero el país no puede contratar un avión solo por ellas, pero tampoco ha logrado que alguna otra nación las ayude.
Pese a que el jueves anterior se enviaron nuevas preguntas a la Cancillería, al cierre de esta nota no se habían obtenido respuestas. Este viernes, también se solicitó una entrevista con Jimena Jaen, la cónsul en Pekín que mantiene comunicación con las ticas, pero tampoco ha sido autorizada.
La Cancillería informó días atrás de que Migración y Extranjería aún analiza las solicitudes de repatriación presentadas por María Belisa y Paola, y que la Embajada mantiene un canal abierto con los 388 ticos empadronados en esa nación asiática.
La desesperación aumenta entre estas estudiantes, quienes tienen más de ocho días sin salir por falta de mascarillas, las cuales, en teoría, recibirán en las próximas horas enviadas por la Embajada de Costa Rica en Pekín.
Ellas aseguran que el gobierno las abandonó, mientras el resto de extranjeros han salido del país. La única forma de hacerlo es por un rescate de cada gobierno, pues China mantiene cerrados los vuelos comerciales, autobuses y trenes a Wuhan.
“No vemos resultados, todo es que estamos trabajando, estamos coordinando, pero no vemos nada. Son cosas que ellos (la embajada costarricense en Pekín) debieron sugerir y reaccionar y eso me tiene bastante enojada. Me queda debiendo lo que ha hecho la embajada, el problema es en la embajada y el trabajo que han venido haciendo”, expresó María Belisa.
Incluso, asegura que ellas mismas le han hecho sugerencias a la misión tica para que las ayuden, y la crítica por reaccionar muy tarde ante una emergencia como la que se vive por el coronavirus.
“Se perdió mucho tiempo valioso. Es evidente la falta de coordinación y desinformación entre ellos, y carecen de experiencia. Por ejemplo, recomendé que nos dieran asistencia psicológica en caso de ser necesario; eso en ningún momento vino de ellos, siendo algo tan básico. Me basé en el documento de la Organización Panamericana de la Salud. Es algo básico que ellos debieron tomar como primera iniciativa para manejar la situación de quienes estamos en el epicentro”, aseveró.
María Belisa también cuestionó que no fue hasta que se cumplieron 15 días del cierre de la ciudad que la embajada les envió máscaras. Sin esa protección, ellas no pueden salir, pues serían detenidas por la Policía, en una metrópoli en que el sistema de transporte público está detenido.
“Puede que no tengan experiencia en una crisis de salud de estas, pero no es la primera vez que pasa en el mundo, existen muchas experiencias previas. Para ser diplomáticos deberían estar informados, porque es una posibilidad que ellos puedan enfrentar al estar fuera y atender a ciudadanos costarricenses”, reclamó.
Paola indica que ella misma alerta a la embajada sobre los rescates planificados que tienen otros países, en procura de que pidan colaboración a alguna de esas naciones.
“Solo ponen excusas, hasta hoy no me dan nada concreto ni conciso, solo me dicen que no tienen presupuesto. Pregunto cuánto es el presupuesto, pero no me lo dan. Ahora ella (la cónsul) dice que pedirá permiso a ver si me pueden pasar el presupuesto (para sacarlas de Wuhan)”.
También dice sentirse frustrada. Ella tiene nueve días de no salir de la residencia estudiantil en la que está. Otra tica en China le envió dinero, pues la comida y el agua empiezan a escasear en su despensa.
“Hasta Siria, Sudáfrica y Bahamas sacaron a su gente”, se quejó Paola.