Multitud pide liberación de ‘presos políticos’ catalanes
AManifestantes leyeron mensajes de los funcionarios durante la protesta
BARCELONA.
Unas 750.000 personas reclamaron este sábado en Barcelona la libertad de los líderes independentistas catalanes encarcelados en una demostración de fuerza de un movimiento que se reorganiza tras el fracaso de la proclamación de secesión.
“Los políticos no han hecho su trabajo; ahora les toca a los ciudadanos” salir a la calle, afirmó Robert Muni, que acudió a la protesta acompañado de dos niños.
En la manifestación se emitió un mensaje del presidente catalán destituido Carles Puigdemont, actualmente en Bruselas, animando a alzar la voz. “Nos hemos de volver a hacer escuchar, que todo el mundo escuche”, pidió.
Diez líderes independentistas se encuentran en prisión preventiva como sospechosos de sedición y rebelión, ocho de ellos miembros del gobierno catalán que encabezaba este experiodista de 54 años al que acompañan en Bélgica otros cuatro consejeros, reclamados todos para declarar por los mismos hechos.
La manifestación se llevó a cabo bajo el lema “libertad de presos políticos” y estaba encabezada por familiares de los líderes independentistas que se hallan en prisión.
La protesta estuvo dominada por los gritos “¡libertad, libertad!”, incluyó la lectura de mensajes de todos los líderes encarcelados y concluyó con el himno catalán.
Inicialmente estaba previsto que discurriera a lo largo de cuatro calles, pero acabó recorriendo 16 calles, más de tres kilómetros, desbordando las previsiones. La marcha se adelantó del 12 al 11 de noviembre, para que tuviera ecos de las grandes manifestaciones del 11 de setiembre, la fiesta nacional de Cataluña .
“Estamos decididos a defender nuestro gobierno e instituciones, que el Estado español nos ha usurpado a lo bestia”, manifestó Blanca Treig, una empresaria barcelonesa de 50 años.
El acto fue convocado por las organizaciones Omnium y Asamblea Nacional Catalana, cuyos líderes, Jordi Cuixart y Jordi Sánchez, están también en la cárcel.
A la marcha asistió la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que defiende un referendo para la región; sin embargo, reprochó la estrategia unilateral de los independentistas. “Queremos que los presos salgan, pero también queremos que un gobierno irresponsable (el catalán) que ha llevado el país al desastre dé la cara”, afirmó este sábado en un mitin de su partido. “Se tensionó el país, se lo llevó a una declaración unilateral de independencia que no quería la mayoría del país (...) engañando a la población por intereses partidistas”, añadió.
Ausente. Quien no acudió a la manifestación fue la presidenta del Parlamento catalán, Carme Forcadell, una independentista de peso que fue puesta en liber- tad bajo fianza esta semana luego de comprometerse a acatar la ley si se mantiene en política, a pesar de que lleva años abogando por desafiarla.
Según la determinación del juez, ella y los diputados encausados por la proclamación de independencia del 27 de octubre manifestaron que o abandonaban la política o la seguirían ejerciendo “renunciando a cualquier actuación fuera del marco constitucional”.
Además, los implicados relativizaron la proclamación de independencia. El cambio de posición abre la puerta a que otros independentistas encarcelados hagan lo mismo.
Todo esto ocurre con las elecciones regionales del 21 de diciembre en el horizonte, convocadaspor el gobierno centralde Mariano Rajoy, luego de cesar al Ejecutivo catalán.