500 despidos en Bancrédito
¢3.500 millones costará indemnización a primer grupo, confirma presidente del Banco
“EL BANCO, AL SALIR DE LA INTERMEDIACIÓN, TENDRÁ (RECURSOS) PARA MANTENER ENTRE 120 Y 130 FUNCIONARIOS DE SALARIO ÚNICO. EL RESTO SERÁ DISMINUCIÓN DE FUNCIONARIOS PARA CUMPLIR CON EL MANDATO DEL GOBIERNO. Rónald Rojas Presidente de Bancrédito “NUESTRA OBLIGACIÓN ES ESTAR AHÍ (SUPERVISANDO) HASTA QUE EL ÚLTIMO CENTAVO DE LOS PASIVOS SEA HONRADO Y ESTÉ CLARAMENTE DETERMINADO CÓMO SE VA A HACER. LA SUPERVISIÓN DEBE VELAR POR LOS AHORRANTES Y DEPOSITANTES. Javier Cascante Jerarca de la Sugef
La Junta Directiva del Banco Crédito Agrícola de Cartago (Bancrédito) acordó el despido de 500 de sus trabajadores.
En un primer proceso serán cesados 300 empleados antes de finalizar julio, por un costo de ¢3.500 millones. A partir de agosto, habrá una segunda salida de personal de la entidad financiera, en la cual serán liquidados 200 funcionarios.
Bancrédito dejará solo entre 120 y 130 empleados para la nueva estructura de banco de fomento y desarrollo que pretende crear el Gobierno, confirmó ayer Ronald Rojas, presidente de la Junta Directiva de la institución.
La Directiva también aprobó, este martes, el cierre definitivo, a partir del 14 de julio, de las sucursales de Pérez Zeledón, Alajuela, Heredia, Tu- rrialba, Tres Ríos y la del Instituto Tecnológico de Cartago.
Rojas confirmó que negocian la venta de las agencias de Tierra Blanca y Pacayas con un banco público, que además contrataría a quienes laboran ahí.
Los despidos de trabajadores se fundamentan en la decisión del Gobierno de Costa Rica, del 25 de mayo anterior, de cerrar la operación de banca comercial de la institución pública.
Cada trabajador despedido recibirá el auxilio de cesantía por el total de años laborados en Bancrédito, acordó la Directiva. La decisión se fundamentó en el artículo 37 del Estatuto de Servicio Civil, que permite reconocer todos los años laborados cuando se suprimen empleos.
Dicho acuerdo coincide con la solicitud de un grupo de empleados que se manifestó ayer frente a las oficinas centrales del Banco, en Cartago.
Pago de obligaciones.
Por otra parte, el presidente del Banco confirmó que ya consiguieron vender parte de la cartera de crédito con bancos públicos, sin detallar cuáles.
La institución vendió ¢55.000 millones de los préstamos otorgados en moneda nacional y $46 millones de las operaciones en dólares, entre la semana pasada y esta. Es muy probable –afirmó Rojas– que al finalizar esta semana consigan colocar otro bloque de créditos con Davivienda y Coopenae.
“El dinero recibido se utilizó para pagar a los acreedores del Banco. Aquellas personas que tenían dinero en cuentas de ahorro y corrientes”, agregó.
Además, se liquidaron los certificados de depósito a plazo que se vencieron.
Los préstamos vendidos son aquellos que están al día y los que tenían menos de 60 días de atraso en el pago.
Bancrédito aún analiza qué hacer con las operaciones con más de 90 días de impago y las que están en cobro judicial, las cuales ascienden a ¢13.000 millones, según datos de la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef).
Bajo vigilancia.
El presidente de Bancrédito reconoció que aún pueden ser intervenidos por la Superintendencia, por lo cual el proceso de salida de la intermediación financiera debe hacerse con cuidado. “Estamos coordinando con la Sugef porque si entramos en irregularidad tres, si se nos cae la suficiencia patrimonial, o por impago ( con acreedores), nos tendrían que intervenir”, reconoció Rojas.
Javier Cascante, jerarca de la Sugef, confirmó ayer que la supervisión de la entidad bancaria cerrará cuando le paguen al último acreedor.
Bancrédito estableció el viernes 14 de julio como fecha límite para que sus clientes retiren el dinero de cuentas corrientes y de ahorro.