Pequeñas gigantes
Dayshalee Salaman y Pamela Rosado armadoras de Puerto Rico de 1,63 de estatura, brillan con luz propia en el baloncesto de los Juegos.
Son ágiles como colibrís y certeras como francotiradores. Dayshalee Salaman y Pamela Rosado, solo miden 1,63 de estatura, pero son grandes jugadoras de baloncesto. Las dos se lucieron en la relajada victoria de Puerto Rico sobre Guatemala 11236, ayer en el Coliseo Elías Chegwin, en el inicio del baloncesto femenino de los Juegos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla-2018.
Lo que no tienen en estatura lo compensan con habilidad, inteligencia, puntería y un corazón tan grande como salsa borinqueña, l o que parece bailar Salaman cada vez que consigue una canasta. “No importa el marcador, es algo de nosotros, es para ponerle sabor, entusiasmo y buena energía, es para disfrutar”, aclara la chica de peinado original, que comenzó a practicar básquet a los 12 años, después de dejar la gimnasia, disciplina en la que fue campeona nacional.
Las dos son armadoras y han llegado más lejos de lo que muchas personas creían cuando empezaban en la disciplina de los aros.
“A todas las de este tamaño nos pasa, es una etapa en que muchas veces no creen en nosotras x o y persona, pero sí hay personas que creen en nosotras como Gery (Ge- rardo Batista, entrenador de Puerto Rico), eso es lo grande que tiene él, que sí cree, sobre todo porque él es del mismo tamaño”, dice Rosado, bromeando con su timonel y generando la risa de su compañera, que segundos después se calma y empieza recordar sus luchas contra los que no apostaban por ella.
“Yo le digo a las niñas que continúen trabajando duro, no importa la estatura, lo que importa es el corazón y la entrega que uno le dé a lo que va a hacer, hay que pensar en grande y ser grande”, expresó Salaman.
Pamela Rosado, de 32 años de edad, está jugan- do sus terceros Juegos Centroamericanos y del Caribe, logró plata en Cartagena-2006 y oro en Mayagüez- 2010. Dayshalee Salaman, que posee pancarta y barra propia en la tribuna (impulsada por su primer entrenador), juega sus segundas justas a sus 28 años.