Narcisistas... de lejitos…

Todos hemos conocido a individuos que creen ser el centro del universo; generalmente, dichas personas presentan conductas arrogantes y están plenamente convencidos de que el mundo gira a su alrededor, y no tienen el más mínimo problema en manipular a los demás para que así lo sea.

Las personas narcisistas constantemente exageran sus propios logros con el fin de obtener elogios que, muchas veces, son inmerecidos; dichas personas, tienden a demeritar los logros de los demás, ya que no soportan no ser el centro de atención. Son personas poco empáticas, les interesa nada mas satisfacer sus propias necesidades y ven a los demás

como objetos de donde deben extraer admiración. El gran problema de lidiar con personas con este tipo de personalidad, es que estas se creen con el derecho a todo; incluso a tu autoestima, tus pensamientos y emociones, y, tu tiempo.

Lidiar con narcisistas, se convierte en una situación compleja y dañina para los que conviven con ellos, porque se ven envueltos en un círculo de ansiedad y negatividad en donde se ve afectado el bienestar psicológico, y, en donde priman sensaciones de frustración, rabia e impotencia. El contacto día a día con un narcisista es agotador ya que debemos poner nuestras necesidades en un segundo plano para satisfacer las suyas, por lo que no tarda en aparecer la fatiga y la desilusión. Lidiar con ellos no es fácil, por eso es mejor alejarse de ellas.

Es importante que tengas en cuenta que un narcisista no apreciará tus esfuerzos por tratar de complacerlo: Muchas veces es mas fácil dejar que se salga con la suya a intentar que se ajuste a las normas sociales; estos individuos no aprecian el esfuerzo que inviertes en él, ya que sienten que es tu obligación el rendirle pleitesía. Para los que viven con un narcisista es altamente frustrante ya que dan todo sin recibir nada a cambio.

Por otra parte, nunca recordará lo que haces bien, solo se centra en lo que has hecho mal. Para estos perfeccionistas nada de lo que hagas es suficientemente. Sus expectativas no son realistas, sus metas objetivos son imposibles de satisfacer, no importa cuánto te esfuerces, nunca llegarás a estar a la altura.

Un narcisista siempre pedirá más, es muy controlador. Como su ego depende de quién lo alimente, se aseguran de que los demás puedan satisfacer sus demandas, cada vez mayores. También te hará perder el sentido del “yo”, pues poco a poco logra que las personas que tiene a su lado lo vean como una prioridad. Dejas de pensar en ti, para pensar en lo que le agradaría.

Por último, la persona narcisista no espera que seas feliz, al contrario, la máxima prioridad es su felicidad. Por eso, te manipulará para que antepongas sus necesidades y generará un sentido de culpa si te sientes feliz.