MANTENIMIENTO A CAMPUS CINCUENTENARIO
Este año, el campus de la Universidad de Antioquia celebró 50 años. Arboleda Céspedes reiteró que en su mantenimiento se invirtió, para 2018, un total de 2.800 millones de pesos en 42 proyectos. Se intervinieron 9.065 metros cuadrados en la ciudadela universitaria y en las regiones y se realizó el mantenimiento a los techos de algunos edificios. Con un empréstito del Banco Interamericano de Desarrollo, por 75.000 millones de pesos, se construirá una nueva sede para la Facultad Nacional de Salud Pública y otras unidades académicas del área de la salud. “En Robledo tenemos proyectados parqueaderos de motos y carros que no existen en esa sede de la Universidad. En Medicina, además, hemos hecho esfuerzos para las baterías de baños y para hacer los ajustes de la estructura del edificio, que ha sido renovada”, explicó el rector. mente 15 o 16 mil millones de pesos. Vamos a pasar, en términos de lo que anunció el Gobierno, de 338.000 millones de pesos de base presupuestal para el 2019, a 440.000 millones de base presupuestal para 2023”.
¿Y qué priorizarán con esos recursos?
“Nos servirán para tener más plazas para profesores. En este momento tenemos 1.606 plazas, la idea es crear 30 adicionales por año en la próxima década. Mejoraremos los contratos laborales de profesores de cátedra y, por supuesto, también se destinarán recursos a bienestar universitario y a seguir consolidando la presencia en regiones”.
Aún con la dificultad para cerrar el semestre, ¿cuáles fueron los principales avances este año?
“En 2018 creamos la Unidad Especial de Paz, porque el compromiso es ayudar en ese proceso, que todo el conocimiento llegue a las regiones que están viviendo el conflicto y también el posacuerdo. También creamos la Unidad Universitaria para el Tratamiento de Conflictos, porque creemos que es importante que los universitarios tratemos de resolver los problemas sin necesidad de recurrir a los procesos disciplinarios.
Logramos, por primera vez, acuerdos con los sindicatos de la Universidad y nos mantuvimos cerca a la comunidad: nos sentamos con todos, asistimos a asambleas y contamos con una mesa de diálogo para hablar de estas problemáticas. Seguimos muy comprometidos con la regionalización y estamos acompañando esta estrategia con una política transversal de internacionalización”.
Hace énfasis en la regionalización, pero en estas zonas cada vez se presentan menos jóvenes a los programas de pregrado. ¿Cómo sortear eso?
“Con la diversificación de la oferta en pregrado y posgrado: llevar más programas que sean pertinentes y obedezcan a las vocaciones e idiosincracia de los habitantes de esos territorios. Que los jóvenes no entren a estudiar simplemente porque no hay nada más que hacer, sino que encuentren allí respuestas importantes a sus aspiraciones”.
Si 2018 fue el año de las discusiones sobre la desfinanciación de las universidades, ¿cuál cree que será el debate en 2019?
“El próximo año será el de la consolidación de la universidad pública sobre lo conseguido en esta movilización. Será un año muy bueno, porque nos va a permitir, con base en lo acordado, tener recursos suficientes para fortalecer las universidades públicas, pero también para crecerlas”