Así se está cocinando la reforma tributaria en Colombia.
El país se prepara para un cambio en el esquema impositivo. Ya hay temas polémicos.
Más empresas y menos impuestos fue una de las consignas que en materia económica utilizó durante la campaña electoral el hoy presidente Iván Duque, para significar con ello que durante su mandato se producirían cambios en el esquema tributario como mecanismo para atraer más inversiones, estimular el emprendimiento, impulsar la generación de empleo y acelerar el crecimiento económico.
Próximo a cumplirse el primer mes de gestión, el ministro de Hacienda Alberto Carrasquilla, ya ha planteado las primeras ideas para ambientar el debate que suscitará la propuesta que se llevará a trámite en el Congreso, posiblemente, antes de que termine este año.
Una de las primeras puntadas fue dada durante el congreso que los afiliados a la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi) realizaron hace quince días en Cartagena. En ese escenario el funcionario indicó que la reforma al marco tributario apostará por reducir la tarifa efectiva que pagan las empresas, así como por mejorar la arquitectura del monotributo para avanzar en la formalización y fortalecer la capacidad de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian).
“En Colombia somos muy distintos al resto del mundo en el frente de la tributación de renta, nosotros obtenemos los recursos del impuesto de renta en un 85 % de las empresas y en un 15% de las personas naturales. En el resto del mundo la proporción es más equilibrada y en los países más avanzados es contraria: el 85 % de los recursos lo aportan las personas naturales y el 15 % las empresas”, explicó.
Una semana más tarde, en la convención de la Asociación Bancaria y de Entidades Financieras de Colombia (Asobancaria), Carrasquilla insistió en la necesidad de ejecutar un Plan de Recuperación Económica que asegure la estabilidad fiscal del país.
Dicha estrategia abarcará ajustes que tienen que ver con los ingresos que percibe el país. “Las empresas formales aportan sus utilidades en grado que va más allá de lo razonable a la tributación”, dijo.
Reiteró que la tarifa efectiva que pagan las personas naturales de ingresos altos es muy inferior a la observada internacionalmente, y sostuvo que “el régimen del Impuesto
al Valor Agregado (IVA) tiene exenciones que son regresivas y que merman en grado sustancial el recaudo”.
IVA a toda la canasta familiar
Sin duda una de las iniciativas de Carrasquilla, que él mismo considera hará muy interesante el debate, tiene que ver con la eventual eliminación de las exenciones y exclusiones del IVA.
En su exposición ante los banqueros, el Ministro comentó que en virtud de que hay bienes exentos y excluidos de ese impuesto, hay ahorros para todos los hogares colombianos.
“(…) Lo que quiero enfatizar es que el ahorro de un hogar en el decil 10 (ingresos altos) es de 278 mil pesos en el mes y en el decil 1 ( ingresos más bajos) son 18 mil pesos, y por eso tiene toda la lógica decir: ¿Por qué no gravar toda la canasta y devolverle a los hogares de menores ingresos con los recursos que estarían pagando los hogares del decil 10?” (ver gráfico).
Lo que hizo notar el ministro de Hacienda, además de atizar la discusión, fue mostrar a la luz de los números quién se está ahorrando, realmente, los dineros de la tributación del IVA.
En palabras de Carrasquilla, “el componente tributario debe incluir mejoras en el diseño del impuesto de renta y del IVA, y se debe mitigar la regresividad de este último tributo con devoluciones a los hogares vulnerables”.
Las observaciones
El director del Centro de Estudios del Trabajo (Cedetrabajo), Mario Valencia, abogó por el desmonte de los beneficios tributarios existentes en el país, agregó también que estos no aportan al crecimiento de la economía.
“Otorgar beneficios debe dejar de ser un hecho político, estos cambios deben estar argumentados técnicamente, así como establecer una temporalidad para su vigencia, para observar si cumple un propósito, o no pasa de socavar las arcas del Estado”, enfatizó.
A su turno, el profesor de Ciencias Económicas Víctor Castañeda, citado por la agencia de noticias de la Universidad Nacional, aseguró que gravar todos los productos de la canasta familiar y devolverles este impuesto a los estratos más pobres no es realista, golpearía a la clase media y podría reducir el consumo de la población con menores ingresos (ver Textualmente).
Y, ¿el resto del paquete?
El investigador universitario, Jorge Coronel, manifestó que aún no se puede hablar de una reforma tributaria, porque ni siquiera se ha estructurado un proyecto y que por eso, en esta etapa, es preferible seguir hablando de la situación fiscal de Colombia. Lo que veremos, en el corto plazo, serán algunos ajustes, y así lo anticipó el Ministro en el debate del miércoles, en el Congreso de la República, sobre el presupuesto para 2019. Allí dijo que hay al menos 50 programas que es- tán desfinanciados y cuestan 25,64 billones de pesos.
Marcelo Carvalho, economista de BNP Paribas para Latinoamérica, expresa que hasta ahora se ha sugerido que los recortes de impuestos serán inicialmente para las empresas, y una ampliación de la base tributaria que todavía es muy baja, pues el impuesto a la renta sólo alcanza el 5 % de los hogares. “Esperamos que la tasa del impuesto a las empresas se reduzca gradualmente a alrededor del 28 % en comparación con 33% que estaba planificado para 2019, durante el mandato del presidente Duque”, añadió.
Pero, por el momento sólo se han esbozado dos pilares de la futura reforma. Vale la pena anotar que en la aprobada en diciembre de 2016, la sola exposición de motivos ameritó un documento de 206 páginas y el texto completo del esquema impositivo requirió otros 183 folios.
A la discusión deberán vincularse otros aspectos como las eventuales modificaciones al impuesto al consumo y el gravamen a los movimientos financieros o 4 x 1.000; igualmente, surgirán ideas para amoldar el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (ver Informe).
Empresarios afiliados a la Andi, como el presidente de TigoUne, Marcelo Cataldo, explicaron que en la industria de las telecomunicaciones algunos municipios, Barranquilla entre ellos, aprovechan normas obsoletas para a aplicar más impuestos a la actividad.
En la mira estarán los tributos territoriales como el impuesto sobre vehículos; industria y comercio; alumbrado público y obras públicas y las estampillas
“La tributación debe incluir mejoras importantes en el diseño del impuesto de renta y del IVA”. ALBERTO CARRASQUILLA Ministro de Hacienda.