Protestas empañan la huelga argentina
Una huelga convocada por la mayor central obrera de Argentina, Confederación General del Trabajo, y una batalla campal desatada en los alrededores del Parlamento, con decenas de heridos y detenidos, rodean el tenso debate de la polémica reforma del sistema de pensiones que impulsa el Gobierno de Mauricio Macri.
Tras el fallido intento de sacar adelante la ley la semana pasada, también en medio de violentas protestas, el oficialismo logró ayer quórum para iniciar la discusión del proyecto en la Cámara de Diputados, pero, a la par, se desató un fuerte enfrentamiento entre la Policía y parte de los numerosos manifestantes contrarios a la iniciativa.
Una lluvia de piedras contra los agentes de seguridad, a la que siguió el derribo de parte del extenso vallado en torno al palacio del Congreso, fueron los primeros incidentes a los que la Policía respondió con disparos de balas de goma y gases lacrimógenos.
Los disturbios se extendieron luego hacia otros sectores del centro de la ciudad, mientras el grueso de los manifestantes, quienes no participaron de los incidentes, se retira-
ba y entraba en acción la Gendarmería y la Policía Federal.
Hasta el momento, el enfrentamiento ha dejado al menos 15 policías heridos y en torno a 81 manifestantes lesionados, además de varios detenidos.
En el Congreso, varios recordaron las violentas jornadas del 19 y 20 de diciembre de 2001, en las que hubo una treintena de muertos y marcó el fin de la Presidencia de Fernando de la Rúa, y reclamaron evitar que se repita una “masacre” como aquella.
La reforma busca modificar la fórmula para calcular los aumentos de los pagos por jubilaciones, que, según el Gobierno, permitirá a los retirados ganar más en 2018, en contra de lo que aseguran la oposición y los sindicatos, que denuncian que el cambio constituye una rebaja en los ingresos de los jubilados.
Al cierre de la edición, no había concluido la sesión