HAY QUE ADAPTARSE A LAS LÍNEAS DE APOYO Y A LA VISIÓN DE CADA GOBIERNO
El gremio cafetero pasó de ser un gremio rico a un gremio austero. En esa medida es indispensable el apoyo gubernamental que cada administración fija, por supuesto con su visión y sus políticas. Antes, hubo una Federación voyante, en bonanza. Hoy es importante adaptarse a las políticas nacionales y regionales. En la gobernación de Aní
bal Gaviria, por ejemplo, se priorizó el estímulo a vivienda de los cafeteros. Nos servía ese enfoque. Luego, en la administración de Sergio Fajardo, se decidió visibilizar los cafés especiales (en los que la Federación lleva 20 años de trabajo) y alentar a la nueva generación, en especial a los jóvenes, con el concurso y los campamentos juveniles cafeteros. Estuvo bien y ahora le buscamos apoyo con las cajas de compensación para continuar. En la gobernación de Luis
Pérez el énfasis está puesto en vías de comunicación e infraestructura en los territorios cafeteros y fortalecimiento de la productividad. Nos adaptamos y recibimos el apoyo. Aceptamos la propuesta y trabajamos juntos.
Lo que hacemos es una lectura de los planes nacionales, departamentales y municipales, para ver dónde cabe nuestro gremio y cómo nos ajustamos entre las necesidades propias y los recursos y planes de cada administración