El luto del fútbol se extiende: el cáncer se lleva al “Bambino d’Oro”
A los 64 años, muere el goleador que lideró a Italia a conquistar la Copa del Mundo de España 1982. Fue protagonista de una increíble historia de rescate de su carrera, tras un escándalo de apuestas en el Calcio.
“No quería irse, pero le di un abrazo fuerte y le dije: ‘Paolo, ya puedes irte. Basta, ya has sufrido demasiado. Deja este cuerpo. Y se durmió”.
Así describía Federica Cappelletti la muerte de su marido. A los 64 años, víctima de cáncer al pulmón, fallece Paolo Rossi, el “Bambino d’Oro”, héroe del título de Italia en la Copa del Mundo de España 1982.
La carrera de Rossi estuvo marcada por la controversia.
Delantero hábil y oportunista, debutó en el profesionalismo en 1973, defendiendo los colores de la Juventus. Tras pasar por Como y Vicenza, con apenas 21 años fue convocado por Enzo Bearzot para defender a la selección italiana en el Mundial de Argentina 1978. Con 21 “primaveras”, sin haber jugado las Eliminatorias, fue una de las figuras del equipo que remató cuarto.
Luego, vendría una mancha en su carrera. Tras el cuarto lugar, firma con Perugia, pero a poco andar es sancionado con dos años de suspensión por haber apostado en partidos del fútbol italiano. Pese a caer en desgracia, Bearzot volvió a confiar en él y lo llama para la “Nazionale” apenas cumple su pena por el escándalo del “Totonero”, justo a tiempo para ir al Mundial hispano. Ahí llegaría a su mayor gloria, siendo el goleador del torneo y, además, levantando la copa. Tal fue su impacto que fue “Balón de Oro”
Goles marcó Rossi con la selección italiana, a la que defendió en 48 ocasiones, incluidos tres Mundiales.
Goles anotó en España 1982, guiando a los “azzurri” a su segundo título ecuménico. europeo ese año.
Luego, estaría incluso en el plantel de México 1986, aunque una lesión no le permitió jugar. Sin embargo, su mayor gloria ya había pasado. Rossi ganó dos títulos de la Serie A y una
Goleador inmisericorde.
Copa de Europa con Juventus. Además, militó en el AC Milan antes de retirarse y dedicarse al comentario futbolístico en la televisión.