CUPOS PARLAMENTARIOS PARA PUEBLOS INDÍGENAS
SEÑOR DIRECTOR
Con respecto a la reunión entre el ministro Moreno y Aucán Huilcamán, en donde este último exigió 12 cupos parlamentarios reservados para los pueblos indígenas, considero que no se puede pretender ganar por secretaría lo que no se gana en la cancha. El mejor ejemplo de esto es el propio Huilcamán, quien participó en la última campaña senatorial, no logrando salir electo. Asimismo, es muy probable que estos escaños generen disputas internas en las organizaciones indigenistas, porque se convertirán en un codiciado botín para los círculos de poder allí enquistados, la mayoría de los cuales se representan únicamente a ellos mismos.
Si para un candidato, de un partido político u otro, le es imposible ganar en una competencia democrática frente a otros postulantes es solamente por su propia incapacidad de plantear propuestas llamativas o masivas, y así lograr adhesiones que le permitan obtener un triunfo. Si no hay liderazgos genuinos y atractivos, o las ideas representan a unos pocos, entonces no podemos pretender dar escaños exclusivos a quienes no los consiguen mediante los votos.
Bienvenidos los parlamentarios de origen indígena, siempre y cuando triunfen en las urnas como cualquier ciudadano de Chile, tal como ya lo hicieron en 2017 las actuales diputadas Aracely Leuquén (RN) y Emilia Nuyado (PS), además del senador Huenchumilla (DC).
Cristóbal Martini Iriarte