SITUACIÓN DE ALEUY
SEÑOR DIRECTOR
Si se concreta la renuncia de Aleuy, el gobierno cerrará su período con un extraño registro, pasando a la historia como una administración donde las figuras políticas del gabinete sucumbieron al segundo piso de La Moneda y ante ministros sectoriales. La experiencia del caso Dominga dejó muy clara la fuerza del ministro de Medioambiente por sobre el equipo económico del gobierno. Y frente a la aplicación de la Ley Antiterrorista, quedó en evidencia que mientras el subsecretario Aleuy avanzaba en una dirección, el ministro del Interior y la jefa de gabinete de la Presidenta lo hacían en otra.
Lo peor de todo es que este conflicto se da en medio del ascenso de la aprobación presidencial. De acuerdo a la encuesta CERC-MORI la Presidenta Michelle Bachelet tiene cerca de un 40% de apoyo, por lo que la salida de Aleuy podría hacer retroceder este pequeño logro. Adicionalmente, la ausencia de Aleuy deja al gobierno en una incómoda posición. Es como si en un equipo de fútbol se lesionara el arquero en pleno partido y el técnico no dispusiera de más cambios. Para rematar, el candidato presidencial del partido de Aleuy sostiene que “lo mandaron de vacaciones” porque “estaba equivocado”.
Si en algún minuto Aleuy pensó en volver, las declaraciones de Guillier reforzarán su decisión de abandonar definitivamente el gobierno. La pregunta en palacio es obvia. Sin Aleuy, ¿quién podrá defendernos?
Mauricio Morales
Director del Centro de Análisis Político de la Universidad de Talca