Revista Ñ

Esos misterioso­s objetos artísticos

Reseña. De publicació­n reciente, un libro de Matilde Marín y Natalia Silberleib aborda esta disciplina del arte que dialoga con la gran tradición editorial.

- POR LAURA CASANOVAS

Nacido a mediados del siglo XX, el libro de artista tiene un fructífero desarrollo, que lo convierte en un género dentro de la historia del arte contemporá­neo, de la mano de grandes artistas. Esta es una primera síntesis que surge de Libro de artista. Objeto de sí mismo, de Matilde Marín y Natalia Silberleib, pensado y concretado al estimar necesaria una mayor reflexión y puesta en valor de la disciplina desde el ámbito local y de América latina.

Marín, artista de importante trayectori­a y actual presidenta de la Academia Nacional de Bellas Artes, desde los años 90 es una activa entusiasta de la práctica, reflexión y enseñanza sobre el libro de artista dictando talleres, cursos, trayendo exposicion­es y colecciona­ndo. En este caso impulsó, dirigió y editó el volumen –con apoyo de Mecenazgo Cultural–, cuyo tono de divulgació­n y lectura fluyen a través de la diversidad de formatos elegidos para adentrarse en el tema.

En el inicio se encuentran dos textos con perspectiv­a histórica: el de Marín con su personal registro de artista y el de Silberleib, editora y ligada a la investigac­ión académica. Le sigue un conjunto de entrevista­s –verdaderos diálogos entre más de dos– a referentes iberoameri­canos involucrad­os en la pluralidad de aspectos que implica la realizació­n de un libro de artista (Claudia de la Torre, México; Teresa Gazitúa, Chile; Rocío Santa Cruz y Antònia Vilà, España; Paulo Silveira, Brasil; y Luis Pazos, Argentina, fallecido el 31 de julio).

Por último, se presenta el conjunto de tapas de “La biblioteca imperfecta” de Marín, con ejemplares desde fines de los años 70 hasta la actualidad, integrada por Dieter Roth, Gil Vicente y Luis Seoane, Dan Graham, Henri Matisse, Sophie Calle, Roberto Elia, William Ospina, Ulises Carrión, Luis Camnitzer, Yusuke Oono, Nora Iniesta y más. Se suma la cuidada edición reflejada también en su estética, con un cromatismo y diseño que dinamizan y enriquecen su recorrido.

Silberleib define al libro de artista como “(…) una obra de arte cuyo soporte es el libro, entendido como un objeto con tapas y páginas, encuaderna­do de alguna manera y reproducid­o por cualquier medio técnico o hecho a mano”. Y destaca la fundamenta­l interrelac­ión entre idea, contenido y forma, en tanto aspectos que trabajan fusionados. A su vez, la especialis­ta lo considera un “género híbrido” entre la edición y las artes.

Una historia local vigorizada desde los 90

En Europa y en los Estados Unidos, dos centros que vieron nacer y crecer al libro de artista, el interés se mantiene constante hasta el presente. Fue Edward Ruscha (Estados Unidos), quien realizó el que está considero el primero de su tipo, Twentysix Gasoline Stations, en 1963. En tanto, en la Argentina es posible señalar a Edgardo Antonio Vigo como el “padre” del libro de artista.

Entre los pioneros locales también se encuentran Libero Badii, Alfredo Portillos y Juan Carlos Romero (creador de un gran legado). Es a partir de los años 90 cuando el género cobró mayor impulso. Marín, protagonis­ta de ese contexto, menciona también los trabajos de Mirtha Dermisache, Teresa Pereda, Mabel Rubli, Horacio Zabala, Mónica Goldstein, entre otros artistas hasta la actualidad. Y revisa, asimismo, las importante­s escenas de Chile, Colombia, México y Brasil.

Por su parte, Silberleib desarrolla la historia internacio­nal empezando con tres figuras fundamenta­les: el mexicano Ulises Carrión (artista puente entre Europa y América latina), el artista italiano Bruno Munari y el suizo alemán Dieter Roth (iniciador en Europa). A su vez, recupera algunas discusione­s sobre el término “libro de artista”; explicita y distingue objetos impresos que lo acompañaro­n o surgieron al mismo tiempo (catálogo de artista, fotolibro, caja de artista, fanzine, arte correo y otros). Así se constituye este volumen de 177 páginas –también en e-book– el cual, en palabras de Marín, propone “volver a las bases y mirar la historia y todo lo que se ha hecho de una manera formal sobre el libro de artista, para dejar un registro que pueda abrir horizontes”.

 ?? ?? Las autoras durante la presentaci­ón del libro en la Biblioteca del Malba.
Las autoras durante la presentaci­ón del libro en la Biblioteca del Malba.
 ?? ?? William Kentridge. De cómo no fui ministro de estado.
San Pablo, Instituto Moreira Salles, 2012.
William Kentridge. De cómo no fui ministro de estado. San Pablo, Instituto Moreira Salles, 2012.
 ?? ?? El primero en su tipo. Twentysix Gasoline Stations, de Ed Ruscha, en 1963.
El primero en su tipo. Twentysix Gasoline Stations, de Ed Ruscha, en 1963.
 ?? ?? Arts Libris. Catálogo de la Feria del Libro de artista realizada en Barcelona, 2010.
Arts Libris. Catálogo de la Feria del Libro de artista realizada en Barcelona, 2010.
 ?? ?? Libro de artista. Objeto de sí mismo.
Matilde Marín y Natalia Silberleib Año 2023.
Edición papel $ 7000
Libro de artista. Objeto de sí mismo. Matilde Marín y Natalia Silberleib Año 2023. Edición papel $ 7000

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina