Cinco temas para recordar al Polaco

1. Siga el corso

Luego de iniciarse con Raúl Kaplún, Goyeneche se suma a la orquesta de Horacio Salgán. En aquel ensamble, el Polaco conoció a su primer referente, Ángel “El Paya” Díaz que, dicen, creó su apodo. Su interpretación de este tango de 1926 prueba su ductilidad para el repertorio gardeliano.

2. La última curda

Junto a “Garúa” es una de sus interpretaciones emblemáticas. Su lectura de esta letra de Cátulo Castillo es insuperable. La grabó con Troilo en 1963, y luego con Pontier y Piazzolla. La simbiosis con el personaje de este tango fue extremándose hasta un punto casi flamenco (ver YouTube junto a Leopoldo Federico).

3. Balada para un loco

Se reconocía como un tanguero tradicional, pero siempre alentó las nuevas tendencias. Esta obra insignia de Piazzolla y Ferrer lo tuvo como primer cantor: la grabó en diciembre de 1969 para RCA Víctor. Y la cantó incluso en Japón.

4. Naranjo en flor

La crudeza de la letra de Homero Expósito encontró a su cantor definitivo en Goyeneche. La registró junto a Atilio Stampone en 1974. Hasta entonces, la corona era de su admirado Floreal Ruiz. Fue uno de los éxitos de su reaparición en los 90 y marcó a fuego a otros músicos, como Andrés Calamaro, que la incluyó en Honestidad Brutal (1999).

5. Berretín

Esta joya condensa toda su capacidad de intérprete. La había grabado en 1967 con Ernesto Baffa y Osvaldo Berlingieri, pero su versión despojada junto al guitarrista Esteban Morgado es una cumbre repleta de sutilezas y sentimiento de la letra de Juan Carlos Mesa.