PAMPITA, LA MUJER QUE NO TIENE PAZ
Desde que se separó de Benjamín Vicuña en 2015 que nunca se la había visto a Carolina “Pampita” Ardohain (41) tan contenta como en octubre y noviembre de este año. La modelo se puso de novia con el empresario gastronómico Roberto García Moritán y a tan sólo dos meses de comenzar la relación él le propuso matrimonio mientras vacacionaban en Punta Cana. Se casaron en el Palacio Sans Souci con una mega fiesta para 240 invitados y se fueron de luna de miel a París. Al regresar apostaron a la convivencia junto a Bautista (11), Beltrán (7) y Benicio (5), los hijos de la conductora, y le prepararon dos habitaciones para Delfina (14) y Santino (13), hijos de Roberto con Milagros Brito. Sin embargo, en medio de tanta felicidad y nuevos proyectos familiares en marcha, estallaron una serie de episodios que se hicieron públicos e hicieron tambalear todo lo recientemente construido. Por un lado, el escándalo con la familia de su marido, que si bien no la involucra directamente la tiene muy preocupada. Según dieron a conocer en el programa Nosotros a la mañana, Roberto no se dirige la palabra con uno de sus tres hermanos llamado Francisco con quien es dueño de dos restaurantes de comida peruana muy famosos en la Ciudad de Buenos Aires: la Mar y Tanta. Al parecer, el conflicto habría comenzado cuando Francisco, sin decirle nada a su hermano, abrió otro local con los mismos productos muy cerca de los que ya tenían pero de forma individual. “Roberto le planteó a Francisco: ‘¿Cómo te abrís solo?, ¿Cómo no avisás?’. La familia pidió que se tranquilicen los ánimos pero la pelea fue creciendo tanto que los familiares empezaron a tomar partido. Todos apoyaron a Francisco por su nuevo emprendimiento entonces Roberto y él se dejaron de hablar”, aseguró Ariel Wolman. Además contó que habían arrancado mal las primeras fiestas en familia ensamblada. “No la van a pasar todos juntos porque ya no se hablan. Si ella pensaba pasar Nochebuena y una Navidad con la familia del marido, la veo difícil”, aventuró. Esto habría amargado mucho a la modelo, quien ya venía golpeada anímicamente por el conflicto que mantiene con la ex niñera de sus hijos. Viviana Benítez, quien trabajó durante cinco años para Ardohain, la denunció públicamente por “maltrato y hostigamiento psicológico”. Además,
Su casamiento con Roberto García Moritán
debía ser el punto de partida para encontrar la armonía familiar que
soñaba. Pero primero surgieron las denuncias por maltrato de la niñera de sus tres hijos y ahora
su flamante marido se peleó por un negocio con Francisco, uno de sus
hermanos