Paradojas productivas
Las empresas aseguran que invierten u$s 50 millones para obtener una nueva molécula que permita controlar malezas o enfermedades y que en definitiva potencie los kilos finales que se obtienen en un lote. Pero, del otro lado del mostrador los números cantan que 1/3 de loa alimentos que se producen en el mundo se desperdician o se tiran. Latinoamércia y el Caribe tienen una participación marginal en esto del desperdicio porque representa tan sólo el 6% de las pérdidas globales. Pero eso no implica que no haya que trabajar en las cadenas de producción y en el consumo para frenar esta sangría de comida. Por lo pronto el Ministerio de Agroindustria de la Nación puso en vigencia esta semana una iniciativa interesante para trabajar en conjunto. “Compartí tu iniciativa” es una sección dentro de la página de Alimentos Argentinos (www.alimentosargentinos.com.ar) que permite relevar las experiencias y resultados en nuestro país, identificar puntos de convergencia y oportunidades de articulación, vinculada a los proyectos que se encuentren en marcha. Otra opción que se puso en marcha es el “Banco de proyectos”, una sección en el sitio web que busca detectar proyectos y vincularlos con actores que puedan contribuir a concretarlos, a través de alianzas promovidas por Agroindustria junto con la Red Nacional para la Reducción de Pérdida y Desperdicio de Alimentos, que ya cuenta con 72 entidades adheridas.
La buena noticia es que Argentina es el único país de latinoamérica que hizo los deberes y contabilizó. Por ahora son 16 millones de toneladas de alimentos que se desperdician al año, pero la meta es reducirlo a la mitad hacia el 2030, como parte de los mecanismos de Desarrollo Sostenible. ¿Llegaremos?
“El 45% de las frutas y verduras que se producen se desperdician o se tiran”.