Los medios públicos tienen un rojo de $ 3.500 millones
Pese a los recortes operativos que se acentuaron en 2018, el Sistema Federal no logró equilibrar este año los números. Denuncian una reducción del 80 por ciento de las producciones propias y también despidos.
La gestión de los medios públicos volvió al centro de la polémica en la última semana con la difusión de un contrato millonario de la TV Pública con el escritor Federico Andahazi, que habilitó una discusión más profunda sobre el ajuste presupuestario, la audiencia y la calidad de sus productos.
Pese a los recortes operativos que comenzaron en 2018, en coincidencia con las restricciones que se impusieron en toda la administración pública cuando comenzó la crisis, el titular del Sistema Federal de Medios Públicos, Hernán Lombardi, no logró equilibrar en 2019 las cuentas de un esquema que incluye la radio y la televisión pública, la agencia de noticias estatal Télam, los canales de cable Paka Paka, Encuentro y DeporTV, así como el manejo del CCK y Tecnópolis.
El ajuste se materializó en la reducción del 80% de las producciones propias y la política de “Paritaria Cero” que abrió distintos focos de conflicto sindical en los que se mezclaron las cuestiones presupuestarias con la discusión política vigente desde la era K.
De acuerdo al Plan de Acción y Presupuesto para 2019 que fue aprobado por el Ministerio de Hacienda durante el mes en curso, Radio y Televisión Argentina Sociedad del Estado estima pérdidas por más de $ 3.500 millones para este ejercicio, resultante del registro de gastos cercanos a los $ 4 mil millones, frente a ingresos cercanos a los $ 400 millones que claramente no resultan suficientes para cubrir los gastos.
“En un momento de escasez presupuestaria, no se le puede pedir al Estado que aporte mucho más”, admitió a PERFIL el vicepresidente de RTA Emilio Lafferriere, quien indicó que pese a todo “estamos contentos con los escasos recursos que pudimos haber tenido, tuvimos una tarea difícil”. Allí marcó el éxito de la tercera temporada de El marginal o el rating que significó la transmisión de la Copa América, con picos de 30 puntos de rating.
Sin embargo, el promedio de audiencia de julio es de 1.8, lo que lo ubica en el quinto puesto del global de canales de aire. En ese aspecto, el fin del Fútbol para Todos auspiciado por el macrismo terminó siendo contraproducente para la TV Pública porque perdió una de sus máximas posibilidades de convocar audiencia y, en consecuencia, atraer ingresos por publicidad.
Lafferriere minimizó la cuestión del rating porque “si bien puede llegar a ser una referencia para Capital, nos mira todo el país, la TV Pública se ve mucho más” y “en cuanto al contenido, nos preocupa mucho más la calidad que la marca de rating”, justificó.
En tanto, Télam continúa siendo otro de los ejes de la crisis de los medios públicos, luego de más de un año de batalla judicial por la reincorporación de 357 trabajadores que fueron despedidos en junio de 2018, en el marco de un ajuste presupuestario bajo la búsqueda de “eficiencia” en la plantilla de personal.