“Ganar, aunque sea pateando un solo tiro”
Osella sabe que el equipo mejoró, pero lo que ahora quiere es triunfar como sea, porque la urgencia se calma con puntos.
Casi como un clamor popular, las calles de Alberdi piden que ante San Lorenzo, mañana a las
19.20 por la 20ª del torneo, “sea el partido despegue” de la versión
2019 de Belgrano. Porque tras cuatro empates en línea, los simpatizantes están más que angustiados y ansiosos por sumar de a tres, como para pensar que la permanencia es factible.
Desde que se puso nuevamente en marcha la Superliga, los hinchas esperan un triunfo que les traiga algo de paz y de esperanza.
“Vamos bien con la idea que tenemos, el equipo está más suelto y corre, podemos darnos el lujo de romper el triángulo interno y poner un jugador de enganche definido más el esfuerzo de dos atacantes que retroceden a las bandas”, expresó Diego Osella al sintetizar la forma en que juega el equipo de Alberdi.
“Nosotros vamos en busca del resultado, no podemos especular y pensar en que nos vamos a soltar los últimos 20 o 25 minutos, porque puede que no nos alcance”, prosiguió.
Osella sabe que necesitan un triunfo él, sus dirigidos y, en especial, la gente, para poder calmar la ansiedad que genera la situación en la que se encuentra el equipo en la tabla de los promedios.
“A veces con mucho menos de lo que generamos en Tucumán se gana, y otras no alcanza con todo lo que haces. Pero no es un consuelo, sino que es una realidad que se vive en el fútbol”, dijo el técnico.
Maduros y con confianza
El grupo del Pirata está rearmado desde enero con jugadores de otras características a las que tenía el año pasado. Más experiencia y mayor cantidad de desafíos superados combinan en la mayoría de los jugadores: “Es así. El equipo está sólido y es un equipo de hombres. Ahora hay que encontrar las variantes en la ofensiva, los jugadores están puestos y el trabajo se hizo. Tenemos que confiar en ellos”.
Una regla no escrita para el hincha insatisfecho sostiene: “El que está afuera es mejor que el que está adentro del campo”. Y en este sentido Osella es contundente al contestar por qué se sostienen en la formación jugadores como Mendoza o Sequeira, tal vez los más resistidos. “(Se sonríe) Mendoza lleva cuatro partidos en Belgrano, lo trajimos para jugar y tiene que reemplazar a Suárez, que no es poca cosa. La gente es así, y si en lugar de fallar en ofensiva fuera en otro sector de la cancha... me estarían hablando de Novillo o de Herrera... es así, está ansiosa y es entendible”, admitió el DT.
“Siempre encuentran algo y a veces hay un chico en inferiores que está convirtiendo y lo piden. Pero no podemos ser injustos con ese chico u otro y posicionarlo a cualquier costo. A (Joaquín) Novillo nosotros lo tiramos con una estructura armada, en cualquier momento pueden jugar (Gerónimo) Tomasetti o Gonzalo Lencina, que también están para jugar, pero cada cosa en su lugar y a su tiempo. No se puede creer que lo que está afuera es mejor de lo que está adentro, porque la cosa viene funcionando... Me podrán decir que no alcanza y es verdad, porque si lo hiciera, estaríamos en otra situación. Pero hay que ser coherentes, pensar y tomar buenas determinaciones”, sostuvo el técnico.
Cambiar es un pedido a gritos del que no está en el día a día, producto de la insatisfacción que le genera ver al equipo en zona de descenso, pero Osella no quiere dejarse llevar por la ansiedad de la gente: “Si cada vez que un futbolista se equivoca hay que cambiarlo, necesitaríamos un plantel de 50 jugadores. Por eso hay que trabajar con coherencia y tranquilidad. Sequeira quedó dos veces en posición de gol el otro día y es un jugador por el que Belgrano hizo una inversión hace seis meses. Puede que esté en una meseta lógica por todo lo que pasó, pero está saliendo y, si puede repetir lo que hizo en el segundo tiempo con San Martín, quizás ese sea el despegue”.
“Aquí necesitamos de todos, de Brunetta, de Cuero, de Mendoza o del que sea. Imaginate si cuando Guidara estaba mal lo sacaba, hoy no lo tenía a Guidara ni a su reem- plazante. Pero ‘Tomy’, con trabajo y mucho sacrificio, recuperó su nivel y se ha hecho un jugador importante en la estructura”, manifestó Osella, que sabe que no puede dejarse llevar por lo que la tribuna pide. “Paciencia es lo que todos necesitamos. Sé que no tenemos mucho tiempo para consolidar el equipo y lograr que se quede en Primera”, agregó.
San Lorenzo, en el camino
El equipo de Jorge Almirón llega golpeado por la falta de triunfos, y el Pirata está más que necesitado de conseguir un resultado positivo que le entregue un poco de oxígeno en su lucha por la permanencia: “La necesidad de ganar está clara y no existe otra cosa. Estamos ilusionados con la levantada, pero tenemos la necesidad de transformarla en tres puntos”.
Para mañana a las 19.20, si Juan Brunetta (con una molestia en el tobillo) no tiene inconvenientes será el reemplazante del suspendido Maximiliano Lugo, expulsado en Tucumán. “Vamos a colocar un jugador que nos puede dar más juego, como para no depender solamente de algunas corridas”, agregó el DT.
“Ellos están en una posición incómoda, que no es la nuestra con el tema de los promedios, pero sí lo es por su plantel, su presupuesto y su historia. Será un partido complicado para ambos y nosotros lo sabemos. Ahora, todo lo bueno que se está insinuando hay que llevarlo a puntos, porque la verdad no alcanza con jugar bien o merecer más”, dijo el entrenador.
Para Osella, el partido con el Cuervo es una chance para ponerse en marcha: “Tenemos que empezar a ganar y esta es una linda oportunidad, por el rival y por el momento. No podemos esperar nada más, estamos en carrera y muy cerca en puntos habiendo ganado poco. Aquí el manual de la excusa no está disponible para nosotros. Hay que enfocarse en lo que viene y en lo que se puede resolver, y no pensar en fallos arbitrales, por ejemplo”.
Los dos están necesitados y ambos equipos buscan un triunfo para calmar sus nervios: “Un triunfo sería corroborar todo lo bueno que se está haciendo, pero la verdad es que si hay que ganar pateando aunque sea un solo tiro al arco, bienvenido sea, por la posición en la que estamos”.