Nuestros temores
A quienes forman parte de revista Rumbos: Les escribo a propósito del artículo “Ya sé que estoy piantao” (Rumbos N°684). Siempre hay miedos: el miedo a la enfermedad, al dolor, a la muerte, a quedar sin trabajo, a lo que otros puedan pensar de nosotros, a ser despreciados, a no ser amados, al aburrimiento, a la soledad. El miedo es el temor que provoca el paso de lo cierto a lo incierto. Este pensamiento invade la mente y nos bloquea. Hay miedo cuando hay inseguridad de algo que no conocemos. Y donde hay miedo, no hay libertad. En nuestro cerebro, todos tenemos un patrón de vida y el riesgo de perder lo logrado produce esta emoción, que está relacionada con el pasado y el futuro. Sus efectos son destructivos, contradictorios y paralizantes, y tienen su origen en el apego, en la dependencia. Estamos viviendo actualmente en una sociedad que nos impone normas, un modo de vida, competencia, valorización, energía, esfuerzo y progreso constante. El miedo nace cuando nos damos cuenta de que si nos apartamos de esta estructura, estaremos desamparados y perdidos, porque dejaremos atrás lo que logramos con tanto empeño y lo que nos otorga seguridad. Cuando comprendemos el proceso del pensamiento y somos capaces de ver esto con claridad, cesa el miedo. Pero ello implica un profundo análisis. Los felicito por vuestros contenidos, que siempre nos permiten aprender y conocer muchos temas importantes para todos. Con el cariño de siempre, Heidi Elizabeth Rótulo, Santiago del Estero.