Un fallo se enfoca en los riesgos de las emergencias policiales
Al confirmar la condena contra un sargento, por un choque fatal en Punta Alta, la Cámara Penal le giró copia al ministro de Seguridad Cristian Ritondo y al juzgado Contencioso, por diversas falencias.
La Cámara Penal de Bahía Blanca no solo confirmó la condena contra el policía que hace 4 años, cuando iba a una emergencia, atropelló y mató a dos jóvenes de 21 años que circulaban en moto en Punta Alta, sino que profundizó el caso.
A partir de una serie de falencias que se detectaron en la investigación, ordenó girar copia del fallo al ministro provincial de Seguridad, Cristian Ritondo, al jefe de la policía departamental e incluso a la justicia en lo Contencioso Administrativo.
En principio, la Cámara consideró razonable la sanción y la pena impuesta al sargento José Luis Ocampo, de 3 años de prisión en suspenso que le había aplicado el juez en lo Correccional Gabriel Rojas.
De esa manera rechazó el recurso presentado por el defensor particular del policía, Mauro De Mira.
El abogado consideraba que el patrullero, que en la madrugada del 19 de mayo de 2015 se dirigía hacia un supuesto robo en progreso en un jardín maternal, circulaba de manera prudente cuando en la esquina de Rivadavia y Espora chocó con la moto que ocupaban Matías Ezequiel Müller y Katherine Rosana Ortiz, ambos de 21 años.
Y que la responsabilidad había sido del motociclista que, según su postura, iba a exceso de velocidad y no respetó la prioridad de paso.
Los camaristas consideraron “suficiente” la prue- ba reunida para condenar a Ocampo porque violó el deber de cuidado.
Tomaron por probado que la camioneta de la policía inició la frenada en la intersección a más de 60 kilómetros por hora, con lo cual duplicaba la velocidad autorizada para esas circunstancias, con alto riesgo para el tránsito.
Fallas en el patrullero, falta de capacitación para conducir y posible mal desempeño de funciones, señaló la Cámara.
¿Por qué iban adelante?
Y también remarcaron que el no funcionamiento de la sirena fue clave, porque “es el instrumento idóneo para alertar a otros conductores respecto de una emergencia”, más allá de las luces de la baliza y de que tocaran bocina al llegar a cada esquina.
Además consideraron “inexplicable” que el móvil que tenía la sirena dañada fuera adelante en la hilera de 4 patrulleros que se dirigían a la emergencia.
Más allá de confirmar la condena, la Cámara decidió “informar, con copia de lo resuelto” al ministro de Seguridad provincial y al jefe de la policía regional.
¿Qué aspectos pueden originar nuevas actuaciones sumariales? además de la falta de la sirena correspondiente, pidieron que se analice el accionar del personal actuante, porque en el juicio quedó en claro que Ocampo no tenía carnet profesional para conducir y que igualmente le habrían exigido que conduzca en esas condiciones y también marcaron como extremo a analizar “la reconocida falta de capacitación” de los choferes para movilizarse en ese tipo de vehículos durante una emergencia.
Por último, libraron oficio con copia de la resolución al Juzgado en lo Contencioso Administrativo de nuestra ciudad, organismo que se encarga de evaluar el funcionamiento de la administración pública.