Las fuerzas rusas abrieron un nuevo frente con Ucrania, que debió enviar refuerzos
El Ejército del Kremiln lanzó un ataque en la región de Kharkiv, en el noreste, tras meses de combates en el este y el sur; creen que busca crear una “zona de seguridad”
KIEV.– Las fuerzas rusas lanzaron ayer un ataque terrestre blindado cerca de la segunda ciudad de Ucrania, Kharkiv, en el noreste del país, y lograron avances limitados, abriendo un nuevo frente en una guerra que se libra desde hace tiempo en el este y el sur.
Ucrania envió refuerzos mientras arreciaban los combates en las zonas fronterizas de la región, según el Ministerio de Defensa, que añadió que Rusia bombardeó la ciudad fronteriza de Vovchansk con bombas aéreas guiadas y artillería.
“Aproximadamente a las 5 de la mañana el enemigo intentó romper nuestra línea defensiva al amparo de vehículos blindados”, declaró el ministerio. “Estos ataques fueron rechazados, continúan los combates de intensidad variable”.
Una fuente militar ucraniana de alto rango que declinó ser nombrada dijo que las fuerzas rusas habían empujado un kilómetro dentro de la frontera ucraniana cerca de Vovchansk.
La fuente dijo que las fuerzas rusas estaban tratando de empujar a las tropas ucranianas hasta 10 kilómetros dentro de Ucrania como parte de un esfuerzo para crear una “zona de seguridad”, pero que las tropas de Kiev estaban tratando de contenerlas. Rusia no hizo comentarios de inmediato.
Ucrania expulsó a las tropas rusas de la mayor parte de la región de Kharkiv en 2022, tras la invasión a gran escala de Rusia en febrero de ese año. No obstante, tras superar una contraofensiva ucraniana el año pasado, las fuerzas rusas han vuelto a la ofensiva y avanzan lentamente en la región del Donetsk, situada más al sur.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, dio parte ayer de “intensos combates” con Rusia, tras la nueva ofensiva.
“Hay intensos combates a lo largo de toda la línea de frente”, declaró Zelensky en un mensaje divulgado por las redes sociales, tras ser informado de la situación por el jefe del ejército. “Hemos discutido de las acciones defensivas y de [los medios de] reforzar nuestras posiciones en la región de Kharkiv”, agregó.
Blogueros militares rusos indicaron que el asalto podría marcar el inicio de los esfuerzos de Moscú para establecer una “zona de seguridad”, la cual el presidente Vladimir Putin se comprometió a crear a principios de año para frenar los frecuentes ataques ucranianos sobre Belgorod y otras regiones fronterizas.
A media tarde, las tropas ucranianas todavía se mantenían firmes contra el ataque, dijo el gobernador regional de Kharkiv, Oleh Syniehubov. “Se están llevando a cabo combates activos en los asentamientos situados a 1 o 2 kilómetros de la frontera con Rusia”, dijo a la televisión ucraniana.
Ucrania había señalado que sabía que Rusia estaba reuniendo a miles de soldados a lo largo de la frontera nororiental, cerca de las provincias de Kharkiv y Sumy. Aunque la última ofensiva de las fuerzas del Kremlin fue en el este del país, los servicios de inteligencia ucranianos dijeron que esperaban también un ataque en el noreste. Las fuerzas del Kremlin intensificaron sus bombardeos sobre la segunda ciudad más grande de Ucrania, a finales de marzo.
Aunque es probable que Rusia no pueda capturar Kharkiv, podría obligar al gobierno a enviar más tropas a la región, lo que colocará a otras áreas del país en una situación de mayor vulnerabilidad ante un ataque. Además, obligar a las autoridades a desalojar a la población civil podría crear trastornos y desviar recursos.
El Ejército ruso también podría intentar cortar rutas de suministro claves en la zona y tratar de aislar Kharkiv, donde actualmente viven aproximadamente 1,1 millones de personas y está solo a unos 30 kilómetros al sur de la frontera.
Las fuerzas del Kremlin tratan de explotar la escasez de municiones y mano de obra en Ucrania después de que el flujo de ayuda militar occidental a Kiev disminuyó en los últimos meses y antes de que llegue el nuevo apoyo prometido de Occidente. Estados Unidos anunció ayer un nuevo paquete de 400 millones de dólares en ayuda militar.
El Ejército ucraniano está a la defensiva a lo largo de una línea de frente de aproximadamente 1000 kilómetros y batalla para construir líneas defensivas fortificadas antes de lo que las autoridades creen que será una mayor ofensiva rusa. Las fuerzas ucranianas son superadas en número de infantería, armas y municiones.ß