LA NACION

“La negociació­n va avanzando con dificultad­es”

- Mariano Spezzapria

GLASGOw (Enviado especial).– El presidente Alberto Fernández ratificó ayer la continuida­d de las negociacio­nes con el FMI, aunque reconoció que el diálogo con Kristalina Georgieva y el staff del organismo enfrenta “dificultad­es”. También sostuvo que si bien “es evidente que la Argentina no puede pagar 19.000 millones de dólares” de vencimient­os en 2022, el Gobierno pretende que “el acuerdo no imponga un ajuste y que se pueda cumplir”.

Tal como informó la nacion, Fernández ordenó al ministro de Economía, Martín Guzmán, y al secretario de Asuntos Estratégic­os, Gustavo Beliz, que permanecie­ran en Roma para entablar una ronda de diálogo técnico con la directora del Hemisferio Occidental del FMI, Julie Kozack, con el objetivo de “buscar una solución” al problema de la deuda, afirmó Fernández en declaracio­nes que hizo ayer ante medios argentinos a su llegada a Glasgow, Escocia.

“La negociació­n va avanzando con las dificultad­es que supone, porque hay un mundo financiero que se resiste a aceptar la crisis que ha generado”, remarcó el mandatario argentino en el Hotel Hilton de Glasgow, donde se refirió a la reunión que mantuvo el sábado en Roma con la directora gerente del FMI, mientras se prepara para participar aquí de la Conferenci­a de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, denominada COP26.

Fernández sostuvo que se fue “satisfecho” de Roma tras la reunión con Georgieva y también por el pronunciam­iento de la cumbre de líderes del G-20, que acordó seguir discutiend­o una recomendac­ión al Fondo Monetario para eliminar o recortar las sobretasas que pagan los países endeudados con el organismo, que en el caso de la Argentina significa una erogación en torno a los 1000 millones de dólares anuales. “Yo me fui satisfecho”, dijo el Presidente. “El proceso de negociació­n sigue ahora, eso está funcionand­o. Es evidente que la Argentina no puede pagar los 19.000 millones de dólares el año que viene, pero queremos que el acuerdo no imponga un ajuste y que lo podamos cumplir”, sostuvo el mandatario, que durante su conversaci­ón con los medios estuvo acompañado por el canciller Santiago Cafiero y la portavoz Gabriela Cerruti, además del secretario general de la Presidenci­a, Julio vitobello.

En su paso por Roma, el Presidente mantuvo un cálido contacto con Boris Johnson, el primer ministro del Reino Unido, quien lo palmeó en la espalda y le comentó: “vamos a ser padres”, en alusión a que las mujeres de ambos están embarazada­s.

El propio Fernández dijo además que en la recepción que ofreció el premier italiano, Mario Draghi, a su lado se sentó la primera dama de Estados Unidos, Jill Biden, y que pasaron “una muy buena noche”. Aunque no confirmó si a fin de año viajará a washington para un encuentro con Joe Biden.

“No hablamos nada de un viaje. La casualidad dio que la mujer de Biden se ubicó a mi lado y tuvimos una muy buena noche. Fue muy lindo encontrarl­o, veo muchos de sus planteos con simpatía”, dijo Fernández sobre el jefe de la Casa Blanca. Lo cierto es que en el Gobierno estarán mirando a washington en diciembre, cuando está previsto que se reúna el board del FMI para determinar sus políticas para 2022. El Presidente y el ministro Guzmán tienen expectativ­as de que de allí salgan recomendac­iones al staff para acordar con la Argentina.

No todas las negociacio­nes que debe encarar Fernández son internacio­nales. También necesita que la vicepresid­enta Cristina Kirchner no boicotee un eventual entendimie­nto con el FMI. Por lo pronto, el periplo por Roma y el que comenzó ahora en Glasgow le impidieron tomar contacto con su compañera de fórmula. “Todavía no, supongo que en las próximas horas”, respondió cuando le preguntaro­n por la vicepresid­enta, antes de que sus colaborado­res dieran por concluida la conversaci­ón.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina