UNA DEUDA CON LA INFANCIA
Hay una gran cantidad de frases hechas erróneas en torno a la adopción; derribarlas es el primer paso para lograr que más niños, niñas y adolescentes encuentren una familia
“Hay que esperar un montón de tiempo y la burocracia es enorme”. “No hay chicos”. “Se necesita cambiar la ley cuanto antes”. “¡Habiendo tantos niños en la calle que se podrían adoptar!”. “¿Y si aparece la familia biológica y lo reclama?”. “Nos anotamos porque no podemos tener hijos propios”.
Estas son solo algunas de las frases que se escuchan con frecuencia y que, para los especialistas, ponen en evidencia que aún hay una gran cantidad de mitos vinculados a la adopción fuertemente arraigados en la sociedad.
Derribarlos y cambiar el paradigma hacia uno que corra el foco del deseo de los adultos a convertirse en padres y lo ponga en el derecho de los niños, niñas y adolescentes a tener una familia es para jueces, defensores, psicólogos y otros referentes en la temática la clave para tender un puente entre ambas esperas.
Los referentes consultados por la nacion hacen hincapié en que hoy las aspiraciones de la mayor parte de los postulantes a adoptar contrastan fuertemente con la realidad de los chicos y chicas en adopción, que en general tienen más de seis años, pueden ser parte de grupos de hermanos y tener algún tipo de discapacidad o problema de salud.
Así lo muestran las cifras. Según los últimos datos de la Dirección Nacional del Registro Único de Aspirantes a Guarda con Fines Adoptivos (Dnrua), actualmente hay 3807 legajos de personas inscriptas en el país para adoptar. De ellos, 877 son de un solo solicitante y 2930, de dos (incluye matrimonios, uniones convivenciales y parejas).
El 88,73% están dispuestas a ahijar a niños de hasta un año y el 90%, de hasta dos. La contracara es que solo el 6,07% adoptarían a chicos o chicas de hasta 10 años, y apenas el 0,26%, de más de 13. Para más de esa edad, los postulantes se cuentan con los dedos de las manos.
Por otro lado, el 46,60% están anotados para solo un niño o niña: únicamente el 3,47% aceptarían hasta tres hermanos y el 0,18% (siete postulantes en todo el país), a cuatro o más. Con respecto a las condiciones de salud de los niños, niñas y adolescentes, el 82,74% no aceptarían que tuviesen alguna discapacidad o enfermedad.
Cambiar la mirada
Lucas Aón, juez a cargo del Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Civil Nº 25 de la ciudad de Buenos Aires, remarca que la adopción es un instituto de restitución de derechos que se centra en el chico o la chica y que consiste en encontrar una familia para un niño y no un niño para una familia.
“La adopción es conformar una nueva familia, no es la llegada de un bebé que hago a mi forma”, agrega Karina Leguizamón, presidenta del Consejo de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes de la ciudad de Buenos Aires, del que depende el Registro Único de Aspirantes a Guarda con Fines Adoptivos (Ruaga).