A Sabella casi no le quedan casillas libres
Con al menos 18 nombres definidos, la zona de volantes es la que aún abre más posibilidades; Tevez no estará en Brasil 2014
L a selección transita por un terreno bien allanado porque Alejandro Sabella consiguió tapizar de nombres propios ese camino. “Podría decir que tengo
alrededor del 70% de la lista”, adelantaba el entrenador en febrero de este año. Y esa sensación se afirmó con los meses, hasta estos días en los que cuenta con, al menos, 18 futbolistas asegurados en la lista para Brasil 2014. Pese a los imprevistos que suelen tender trampas en el mundillo futbolístico, a 272 días de la Copa quedan muy pocos casilleros libres. Y hasta los candidatos para esos pocos cupos son bien reconocibles. Casi inédito en los últimos ciclos de selección,
porque ni espacio para sorpresas parece reservarse Sabella. “Cuandoencuentroungrupo,es
muydifícilquecambie”, advirtió un buen día... Y desde entonces no ha dejado de certificarlo.
Las convocatorias y hasta las formaciones – salvo lesiones o suspensiones– repiten una previsibilidad que resume muchas explicaciones. La construcción de la lista está articulada sobre el más absoluto sentido común sabellia
no. Con el beneplácito de la naturalidad se encadenan los apellidos de Mascherano, Higuaín, Garay, Di María, Romero, Gago, Zabaleta, Agüero… un tal Messi.
La construcción de la nómina presentaría tres arqueros, siete defensores, siete volantes y seis delanteros. Con una tendencia del entrenador por privilegiar futbolistas polifuncionales, que le permitan cambiar esquemas tácticos durante la marcha de un partido con los mismos nombres, es decir, sin tener que obligatoriamente gastar sustituciones. Como Campagnaro, que puede cubrir la zaga, las dos bandas y se adapta a línea de 3, de 4 y de 5.
Los tres arqueros no encierran misterio: Romero –que debe ganarse la titularidad en Monaco para que no peligre su N°1 en la selección–, Andújar y Orion. Ni Saja ni Barovero. A la defensa sólo le falta un nombre que hoy discuten el ascendente Basanta –por el conocimiento que Sabella tiene de él y la adaptabilidad a varias posiciones–; Sebastián Domínguez, el capitán del seleccionado local, y Ansaldi, una alternativa por los andariveles que prácticamente no son ocupados por laterales auténticos.
El medio campo es el sector con más boletos para definir. Hasta tres lugares podrían quedar. Sabella jerarquiza los volantes “inteligentes”, los que saben leer los momentos de los partidos. Biglia, hoy, es un alumno aventajado, una alternativa tanto para Mascherano como para Gago. El DT también sabe que Di María necesita un recambio, y aunque con características diferentes, ahí esperan Lamela, Ricky Álvarez y Montillo. Y un volante mixto más, con despliegue, retroceso e incursiones ofensivas surgiría entre Maxi Rodríguez, el Principito Sosa, Guiñazú y Augusto Fernández.
Arriba están Messi, Higuaín y Agüero. Y Lavezzi, el primer suplente. Y alguien más. Hoy, es Palacio. Pero Sabella no dejará de buscar hasta la antesala del Mundial una referencia con altura, un jugador de área como variante para Higuaín. Por ahora, ni Di Santo ni Barcos ni anteriormente Denis lo convencieron, por eso fue creciendo la figura de Palacio, pese a sus desajustes frente al arco, por su disposición para los esfuerzos invisibles y las coberturas tácticas.
Carlos Tevez no irá al Mundial. Y en los últimos meses ya han quedado muy relegados Clemente, Peruzzi, Pastore o Ponzio. Como Nicolás Burdisso, que salió por la rotura de los ligamentos de la rodilla izquierda en Barranquilla y nunca más volvió. O el pibe Mauro Icardi, que ni fue citado entre tanta abundancia ofensiva. La lógica de Sabella no les guarda lugar a las sorpresas.ß