Kicillof endurece restricciones y el 83% de la Provincia está bajo la fase más dura
Bahía Blanca volvió desde ayer a fase 3. Hay más actividades, pero casi no quedan partidos grandes en fase 4 o 5.
Bahía Blanca era uno de los distritos grandes que venía zafando, pero ya no: desde ayer, se sumó a los municipios donde rige la fase más restrictiva de la cuarentena por el coronavirus. Y con esta nueva decisión del gobernador Axel Kicillof, el 83% de los habitantes de la Provincia quedaron incluidos bajo las normas más duras del confinamiento.
Hasta ahora, Bahía Blanca, uno de los partidos de cabecera del sur bonaerense y donde viven unos 300 mil vecinos, estaba en la fase 4. Lo bajaron a la 3. En paralelo, Kicillof decidió flexibilizar condiciones en otro distritos: por ejemplo, en Bragado y Colón, que pasaron de fase 3 a 4; y en Ayacucho, General Lavalle y Salliqueló, que pasaron de la 4 a la 5. El tema es que entre estos siete municipios que se abrieron un poco más, no llegan (entre todos) a 100.000 habitantes.
La excepción de flexibilizar los más chicos y cerrar los más grandes se quebró ayer con Tapalqué: aunque ronda sólo los 10.000 habitantes, las condiciones del aislamiento se endurecieron (pasó de fase 5 a 4).
Con estas últimas modificaciones, en cantidad de distritos y superficie, la mayoría de la Provincia está en las fases más abiertas: 72 municipios se rigen por la fase 4 y 20, por la 5. Sin embargo, por la densidad poblacional, los 43 partidos que están en fase 3 suman al 83% de la población bonaerense: unos 14,5 millones sobre 17,5 millones del total.
Como viene contando Clarín, esta realidad dispar dentro de la Provincia se contrapone aún más cuando se la compara con la Ciudad. Sobre todo si se ven las decisiones de Kicillof y el jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta sobre el AMBA, el área que integran más de 20 partidos del Conurbano y la Ciudad.
Ayer, por ejemplo, una de las principales novedades en la Provincia es la posibilidad de visitar los cementerios. Para ello, se difundió una instructivo de unas 14 páginas. En paralelo, la Ciudad comunicó que abrirán terrazas y patios de bares y restoranes e insistió ayer ante el Ministerio de Educación de la Nación para intentar dar clases presenciales.
Dentro de la comunicación oficial de la Gobernación, se recordó las actividades que están permitidas en cada fase. Y vale un dato de contexto: más allá de una postura más restrictiva, en Provincia aún la fase más cerrada (la 3) fue incorporando muchas actividades permitidas. Esto se comprueba con una circulación que fue aumentando cada semana en la calle.
La fase 3 ya tiene 130 ítems permitidos: trabajos esenciales vinculados con la alimentación hasta profesiones como psicología, decenas de rubros fabriles y de producción.
La fase 4, en tanto, incorpora 10 puntos más de aperturas: personal auxiliar de casas particulares; obra privada de construcción; venta textil al por menor, prendas de vestir, calzado y juguetes en comercios de cercanía con ingreso de clientes; salidas de esparcimiento; actividades religiosas; servicio de comidas y bebidas para consumo en locales gastronómicos; servicios de Gestoría; ferias itinerantes de alimentos; servicios de lavadero de autos; y competencias automovilísticas.
La fase 5, por último, también permite: ensayo de obras musicales, teatrales, etc., asistencia a espacios culturales/ateliers de parte de sus artistas, actividades deportivas al aire libre, actividades recreativas con distanciamiento social, gimnasios, talleres culturales y reuniones sociales de hasta de 10 personas en espacios públicos.
Lo que sigue expresamente prohibido es, entre otras cosas: servicio público de transporte de pasajeros interurbano, interjurisdiccional; turismo; y dictado de clases presenciales. ■