Oscar Parrilli
El ministro advierte un aumento. “Es difícil tener números reales porque las encuestas no son presenciales”.
Senador kirchnerista. Ofensiva contra la prensa
Siguiendo, como siempre, los deseos de su jefa Cristina Kirchner, ahora atacó a periodistas como Lanata, Nico Wiñazki, Santoro y Majul, Se ganó el repudio inmediato de las entidades de medios.
El Gobierno Nacional admitió ayer que no tiene cifras reales de pobreza en el país debido a la imposibilidad de realizar encuestas presenciales por el coronavirus.
Lo dijo el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, quien advirtió que los datos que dará a conocer el INDEC en septiembre “van a dar sin dudas un aumento en la pobreza y en la desigualdad”.
Es curioso ya que Arroyo vino a desmentir al propio titular del INDEC, Marco Lavagna, quien sostuvo que el INDEC que concluyó su relevamiento el lunes pasado, tiene datos robustos, pese a que el grueso de las encuestas no fueron presenciales sino telefónicas (ver en esta misma página).
Muchos recordaron en las declaraciones de Arroyo la intención que llevo finalmente a la práctica Axel Kicillof cuando era ministro de Cristina Kirchner.
En marzo de 2015, el entonces ministros dijo: “Yo no tengo el número
Se necesitan cerca de 13.000 casos para medir bien la pobreza. Es muy difícil lograr en esta circunstancia números reales”.
En el último trimestre de 2019 la pobreza era 38,7%. A principios de año teníamos 40% de pobreza general y 50% en los niños”.
Creo que la economía rebota rápido en un contexto difícil, con mucha gente que queda sin ingreso. Pero sí, rebota”.
de pobres , me parece que es una medida bastante estigmatizante”.
Con esta curiosa definición, el ministro Kicillof, justificó la desaparición de las estadísticas oficiales de pobreza, registrada desde fines de 2013.
En realidad, desde el inicio de la manipulación de los datos públicos en 2007 hasta 2013, el INDEC sí publicó esos datos, pero, con la distorsión de las cifras de la inflación, el cálculo oficial de pobreza perdió toda relevancia.
Ayer el ministro Arroyo reconoció que el INDEC midió un 35% de pobreza en el último semestre de 2019, pero en el último trimestre era de 38,7%. Está claro que subió la pobreza, no hay ninguna duda. Nosotros a principios de año teníamos 40% de pobreza general y 50% en los niños, pero es muy difícil tener números reales porque no se pueden hacer encuestas presenciales”, precisó Arroyo en una entrevista con Futurock.
Detalló el funcionario que “se necesitan cerca de 13.000 casos para medir bien la pobreza”.
Sin embargo, Arroyo fue optimista en relación sobre la recuperación económica, al considerar que después de la pandemia habrá “un rebote rápido, sobre todo en el consumo”.
“Argentina tiene una gran red social y una gran estructura de red económica de pymes y comerciantes que la pelean y saben manejarse en medio de la crisis. Aprendimos todos de la experiencia de 2001. Hay un mejor Estado”, enfatizó Arroyo.
Y sumó: “Creo que la economía rebota rápido en un contexto difícil, con mucha gente que queda sin ingreso. Pero sí, rebota y empieza a reconstruirse en base al consumo”.
Para el titular de Desarrollo Social “la gran red social del país es la misma que tiene en el tejido productivo y que la va a hacer rebotar mucho más rápido que otros países de América Latina”.
Las últimas cifras con el desplome de 26,4% de la actividad económica en abril y el derrumbe de las exportaciones parecen ponerlo en duda. ■