Crecen los contagios y el Covid-19 ya circula por casi todo el Conurbano
Hasta el domingo se detectaron 217 casos. Moreno es el que más tiene, con 25. Luego, San Isidro y Vicente López.
La preocupación de los intendentes de la provincia de Buenos Aires crece día tras día. Pese al paquete de medidas económicas que anunció el presidente Alberto Fernández desde el inicio de la cuarentena total, que continuará al menos hasta el 13 de abril, los alcaldes advierten que la crisis y el parate económico impactarán, especialmente en el Conurbano, que contiene a los sectores más vulnerables. Y es, precisamente, en el ámbito metropolitano donde se concentra la mayoría de los 217 casos confirmados por coronavirus, lo que enciende las alarmas de cara al incumplimiento de la cuarentena.
Ante la ausencia de datos oficiales, dado que el gobernador Axel Kicillof siguió la recomendación de Nación y no difunde los casos distrito por distrito, Clarín hizo un relevamiento de la situación en cada municipio de la provincia para trazar un mapa de cómo avanza la enfermedad en la pro
Volcamos en salud o volcamos en lo económico. En mayo no habrá otra que bajar sueldos. No entra un peso”.
Gastón Granados.
A cargo del municipio de Ezeiza.
Podemos aguantar la primera oleada. Le pedimos a la gente que pague las tasas por los parlantes de los móviles comunales”. Gustavo Posse.
Intendente de San Isidro.
vincia. Con 129 casos positivos, la primera sección reúne más de la mitad de los contagios confirmados en todo el territorio. Moreno, con 25 positivos; San Isidro, que cuenta 20, y Vicente López (19) lideran ese listado. En su mayoría, se trata de personas con antecedentes de viaje.
Luego asoman Pilar (12), Tigre (9) y Malvinas Argentinas (7), en una zona en la que apenas 6 de los 24 distritos no registran enfermos de Covid19. Uno de ellos, incluso, con una población que supera los 263 mil habitantes, como José C. Paz.
Si a los distritos del corredor norte y del oeste se les suma los de la tercera sección, donde La Matanza (12) y Quilmes (8) registran casi la mitad de los 43 positivos; se halla al 83 por ciento de los casos de la provincia.
Los restantes están en: Mar del Plata (6), Bahía Blanca (4), La Plata (4), Alberti (2) Necochea (2), San Andrés de Giles 2, San Pedro (2), Azul (2), San Antonio de Areco 1, Coronel Dorrego 1, Tandil (1), San Cayetano (1), Lobería (1), Dolores (1), Junín (1) y Bragado (1).
Aquí, una aclaración que hace el Ministerio de Salud nacional: los casos se cuentan según el domicilio que figura en el Registro Nacional de las Personas del paciente, más allá del lugar donde está internado. Hay, además, una demora en la notificación por parte de Nación a cada municipio. De ahí que haya 11 de los 217 casos que todavía estén sin procesar por los distritos.
“La discusión de las cuasimonedas es algo cierto porque yo lo he charlado con algunos intendentes”.
Lucas Ghi.
Intendente de Morón.
De todos modos, si bien el número en territorio bonaerense es alto en relación a los 820 que hay a nivel nacional, los intendentes prevén que continúe creciendo, a partir de la compra de más reactivos y de la descentralización del Instituto Malbrán, que permitirá empezar a testear a los pacientes que registren síntomas y no hayan viajado al exterior ó tenido contacto estrecho con un infectado ó un turista.
“Yo no tengo ningún confirmado pero pronto va a aparecer alguno. No tengo dudas”, admite, entre lamentos, un alcalde que pide anonimato, como la mayoría, porque la línea oficial es “no dar detalles de infectados” para “no generar pánico” en la población.
Ese es todo un problema para los jefes comunales, que no pueden controlar la información que se filtra en el territorio. Es que, al menos por ahora, cada caso sospechoso genera un revuelo especial. Así, los medios locales suelen llegar antes con la novedad que el reporte diario que Nación envía a la Provincia y, luego, a los municipios; por lo que los mandatarios se ven obligados a dar información oficial para llevar tranquilidad y, en ocasiones, desmentir fake news. Sólo un pequeño grupo evitó sacar comunicados de prensa y tampoco dejó actuar como vocero al secretario de Salud municipal.
El argumento de Nación se apoya en algunos focos de violencia que se advirtieron desde que se conoció el primer caso en la Argentina.
Un intendente contó a Clarín el padecimiento de un infectado que, tras recuperarse, sufrió discriminación de otros vecinos que por temor a contagiarse no lo querían en su edificio, cuando tras el alta en el hospital fue enviado a su departamento para cumplir con el aislamiento obligatorio.
Algo similar a lo que ocurrió a Lucía Miguel, una joven de 22 años de Lomas de Zamora, que tras volver de París y recibir el resultado positivo de Covid-19, fue hostigada por gente que ni conocía. “Sufrí más por la difamación y la agresión que por el virus”, le contó días atrás a Infobae.
También fueron víctimas de los escraches pacientes que no tenían el virus pero que habían sido analizados por tratarse de casos sospechosos.
El pánico llega hasta los pueblos más pequeños. Clarín publicó el revuelo que se generó en Udaondo, una localidad de apenas 400 habitantes, dentro del partido de Cañuelas, tras la muerte de Juan González, un peón rural de 78 años, que -se supo luegofue víctima del coronavirus. ■