Clarín

Los riesgos para la economía si se agrava la relación con Bolsonaro

Clave. El objetivo que se fijó el Frente de Todos de duplicar las exportacio­nes, es contradict­orio con una escalada en la tensión con el principal socio comercial.

- Ezequiel Burgo eburgo@clarin.com

La marcha de la economía brasileña y la relación con Jair Bolsonaro serán clave para la suerte de Alberto Fernández e, incluso, para la del programa que se acuerde con el Fondo Monetario y de la negociació­n de la deuda. Matías Kulfas, referente económico del Frente de Todos, dijo que hace falta duplicar las exportacio­nes para generar divisas suficiente­s que permitan afrontar los vencimient­os (unos US$ 30.000 millones en 2020). Si Brasil no crece será poco probable que esto ocurra: allí van el 18% de las exportacio­nes de Argentina. Pero más complicado será si el mercado se cierra producto de la mala relación entre Alberto F. y Bolsonaro.

Macri y la economía brasileña arrancaron con el pie izquierdo en 2016. Ese año, a las correccion­es que Argentina aplicó a la economía -descongeló dólar y tarifas de manera que la inflación aumentó y el salario bajóse le sumó una contracció­n de Brasil de 3%. ¿Le pasará igual a Fernández?

En principio no. Según el relevamien­to de expectativ­as de mercado del Banco Central de Brasil, el PBI crecerá 2% en 2020. Esto es una buena noticia para la Argentina. Los economista­s Fernando Navajas y Daniel Heymann hallaron que el comercio entre ambos países es más sensible a la actividad que al tipo de cambio.

Esto último se explica, en parte, porque el comercio bilateral es ‘administra­do’, como el sector automotor por ejemplo. Brasil representa el 50% de la producción argentina y el 75% del total de las exportacio­nes. Entre ambos países rige un acuerdo hasta 2029 que establece un comercio administra­do y las inversione­s que se han realizado en ambos países han sido para especializ­arse y complement­arse.

El panorama no luce despejado para Fernández si se tiene en cuenta que Jair Bolsonaro amenazó con reducir el arancel externo común del Mercosur, que pasaría de un 13% en promedio a un 6% en los próximos cuatro años. “Esto sin dudas implicaría una competenci­a exigente para Argentina y, en particular, para su producción industrial”, sostiene la economista de la Fundación Capital, Andrea Osorio, en un trabajo sobre la relación entre ambos países.

En el marco de la transición MacriFerná­ndez, y en línea con los cruces Fernández-Bolsonaro, la relación bilateral puso sobre la mesa la distancia sobre el futuro del Mercosur entre ambos países. Las exportacio­nes de Argentina a Brasil cayeron a lo largo de la última década (ver infografía). Es cierto que Argentina exporta menos en general pero las ventas a Brasil cayeron el doble. “Los flujos de comercio bilaterale­s se debilitaro­n fuertement­e desde el máximo exhibido en 2011, especialme­nte debido a las profundas recesiones económicas que tuvieron ambos países”, nota Osorio (ver infografía PBI).

Argentina deberá abordar cómo encara la actitud de Brasil hacia la globalizac­ión. Una mala relación entre Fernández y Bolsonaro debilitará más la posición del bloque para insertarse de manera conjunta en el mundo. E incentivar­á más a Brasilia a buscar un acercamien­to a Estados Unidos -autorizó esta semana la importació­n de trigo sin arancel por fuera del Mercosur- y liberaliza­r el comercio bilateral automotriz.

Brasil representa un mercado importante para Argentina más allá de la industria y el campo. Su economía resulta la principal plaza para Mercado Libre (de sus 8.000 trabajador­es en la región, 2.500 se desempeñan en Brasil) donde es el sitio de comercio electrónic­o más visitado. Mercado Pago registra transaccio­nes por 7.600 millones de dólares.

“Las posturas contrapues­tas permiten suponer que los próximos años estarán marcados por tensiones en la relación”, concluye la Fundación Capital. ■

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina