Clarín

Para la Justicia de Europa, el sabor no tiene derechos de autor

Debate gourmet. Un fallo determinó que los alimentos no están alcanzados por el copyright. Fue el final de una disputa legal entre dos fabricante­s de quesos.

- Adriana Santagati asantagati@clarin.com

El plagio es un tema universal. En la música, el cine, la literatura y hasta en la cocina. Pero un fallo judicial parece cerrar, al menos en este último caso, la discusión: según el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), el sabor de un alimento no tiene copyright.

La sentencia del tribunal de Luxemburgo se conoció ayer y resuelve una disputa cuya historia comienza en 2007, cuando un comerciant­e holandés de verduras creó el “Heksenkaas”, un queso para untar a base de crema y hierbas. Pero luego cedió los derechos sobre el producto a una compañía llamada Levola.

Levola consideró que el queso era una obra protegida por los derechos de autor y llevó a la Justicia de Holanda a su competidor­a Smilde, que desde 2014 producía el queso “Witte Wievenkaas” para una cadena de supermerca­dos.

“Levola afirma que el sabor del ‘Heksenkaas’ es una obra protegida por el derecho de autor y que el sabor del ‘Witte Wievenkaas’ es una reproducci­ón”, explicó el TJUE sobre los motivos de la demanda, que tras distintas instancias llegó a la máxima autoridad judicial. Sin embargo, los jueces fallaron en contra de Levola ya que, estimaron, en la legislació­n europea una obra debe ser identifica­ble “con suficiente precisión y objetivida­d” y, en el caso de un alimento, “no es posible” esa identifica­ción. Según el fallo, a diferencia de una película o de un libro, la identifica­ción del sa- bor “se basa esencialme­nte en sensacione­s y experienci­as gustativas, que son subjetivas y variables”.

“El tribunal dice que lo que parece aplicarse a mirar y ver no se aplica a probar y oler”, se lamentó Michel Wildenborg, ejecutivo de Levola. Por ahora no tienen más opciones legales salvo que, establece el fallo, en el futuro la tecnología llegue tan lejos como para determinar gustos objetivame­nte.

Y es que, aquí, está el punto central del debate: ¿qué constituye el sabor de un alimento? “No es sólo el gusto: interviene­n muchas cuestiones organolépt­icas, el olfato, la vista... Y es como una lupa: a medida que más te acercas y ves más fino, notás más di- ferencias”, afirma Gabriel Famá, presidente de la Asociación Fabricante­s Artesanale­s de Helados y Afines , entrenado por su oficio en esto de crear sabores. Para él, es imposible patentar un sabor: “Si se lo das a probar a 10 personas, las 10 te van a decir que encuentran notas distintas”. Laura Rolón es licenciada en alimentos y trabajó siete años en el área de lácteos del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI). Conoce bien el paño del queso y coincide con los argumentos de la Justicia europea: “Por ahí la técnica de producción de un queso pueda tener copyright, pero no el sabor porque en él interviene­n muchos factores que no se pueden controlar del todo, como la materia prima, las bacterias que están en la planta, cuestiones de maduración”. “En este caso podríamos decir ‘¿Quién se ha robado mi queso?”, bromea la periodista gastronómi­ca María De Michelis, en referencia al libro de management. “Pero nadie te lo robó: te robo tu idea, tu sabor... pero eso no se puede regular”, aclara. Para ella “debería haber cierta cuestión ética o apelar a la propia creativida­d. Una cuestión es inspirarte y otra es el copy paste”.

Del lado de los cocineros hay coincidenc­ia. “No existe el derecho de autor sobre sabores, es ridículo decir que alguien es el dueño de una combinació­n gustativa. Puede ser el creador, pero no el dueño”, sentencia Pedro Bargero, chef ejecutivo de Chila. “Cada cocinero tiene su forma de hacer las cosas y el sabor de cada uno es personal. Cada chef tiene su distinción”, acuerda Maximilian­o Matsumoto, chef de Aldo’s. ■

 ??  ?? Heksenkaas. Una firma dice que otra le copió este untable, pero la Justicia falló que el sabor es subjetivo.
Heksenkaas. Una firma dice que otra le copió este untable, pero la Justicia falló que el sabor es subjetivo.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina