El avión solar superó la prueba más difícil
Aterrizó ayer en Hawái después de volar sin interrupción 5 días y 5 noches, en un recorrido de 8.300 kilómetros.
El Solar Impulse 2, el avión impulsado por energía solar que está dando la vuelta al mundo, completó ayer su tramo más largo al aterrizar poco después del amanecer en Hawái. De esta forma alcanzó nuevos récords de aviación.
El avión, piloteado por uno de los cofundadores del proyecto, Andre Borschberg, sobrevoló la zona durante más de media hora para aterrizar a tiempo en Honolulú, en lo que los organizadores llamaban “el momento ideal”: después de la salida del sol. En Argentina eran las 13 horas.
Borschberg había partido el lunes desde Japón para este tramo, el más complicado de su travesía, con la que dar una vuelta al globo impulsado sólo por la energía del sol. Para este octavo tramo, el Solar Impulse 2 recorrió 8.300 kilómetros, un vuelo que demandó cinco días y cinco noches.
El vuelo de 118 horas de Borschberg superó el récord previo de 76 horas para un vuelo en solitario a través del Océano Pacífico. También rompió el récord del vuelo más largo, tanto en duración como en distancia, realizado por un avión impulsado por energía solar.
“Este vuelo a Hawái no sólo es histórico para la aviación, sino que es histórico en temas como energía y tecnologías limpias”, tuitearon los organizadores.
Tras aterrizar en Honolulú, Borschberg fue recibido con un fuerte aplauso y el típico collar de flores hawaiano. También hubo expresiones de júbilo en el centro de control de vuelos en Mónaco.
Durante su cansador viaje en la pequeña cabina del avión de fibra de carbono, Borschberg apenas pu- do moverse y tuvo pocas pausas. Como máximo, podía dormir 20 minutos por tramo. Sin embargo, el piloto se mostró de buen humor al aterrizar: “¨Hay alguien que me pueda recomendar una buena casa de carne en Hawái?”, escribió en Twitter.
Interrogado por un periodista, Borschberg dijo que no estaba cansado. “Hice mucho yoga y meditación”, contó. “Cuando estaba estresado, me distanciaba de mí mismo y modificaba mis reacciones para estar menos estresado”.
Añadió que el vuelo demostró que las tecnologías empleadas en este avión demandan una eficiencia energética que “pueden ser usadas en cualquier lado”, en otros campos más allá de la aviación.
El Solar Impulse 2 inició su intento de convertirse en el primer avión solar en viajar alrededor del globo el 9 de marzo en Abu Dhabi. Ya voló sobre India, el Himalaya y China. Pero varias veces el mal tiempo lo perjudicó. Es así como la nave, cuyo ancho es, con 72 metros, mayor al de un Jumbo, tuvo que aterrizar fuera de su programa en la ciudad japonesa de Nagoya.
Los suizos Borschberg y su socio Bertrand Piccard buscan con el vuelo llamar la atención sobre el cambio climático y la posibilidad de nuevas tecnologías menos dañinas para el medio ambiente.
Desde Hawái, la nave seguirá viaje a Phoenix, en el estado norteamericano de Arizona. Ese vuelo será pilotado por Piccard. Después de otras dos escalas en Estados Unidos, el avión regresará a Europa volando sobre el Atlántico.
Impulsado por cuatro turbinas, se espera que el avión complete un total de 13 escalas en su vuelta al mundo, pasando unos 25 días en el aire a lo largo de cinco meses.