Imputan a Milani y Aníbal F. por “ablandar” la custodia de Nisman
Lo hizo el fiscal Marijuán por una denuncia de Carrió. Pidió el sumario policial y otras pruebas pedidas por la diputada.
El fiscal Guillermo Marijuán imputó al jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, al jefe del Ejército, teniente general César Milani, y al secretario de Seguridad, Sergio Berni, entre otros, por haber supuestamente “ablandado” a la custodia del fiscal, Alberto Nisman, unos días antes de su sospechosa muerte. Otro de los imputados es Ronaldo Jonte, jefe del departamento Custodias de la Policía Federal.
En un requerimiento de instrucción al que accedió Clarín, Marijuán también pidió una serie de medidas de pruebas por una denuncia de la precandidata presidencial del ARI-CC, Elisa Carrió, entre ellas, el sumario abierto contra los custodios de Nisman por parte de la Policía Federal. Otra de las medidas de prueba de Marijuán fue solicitar a la Inspección General de Justicia los balances de la empresa American Tape que perteneció al ex hombre fuerte de la SIDE K, Antonio Stiuso, quien ahora es denunciado por el Gobierno como supuesto “cerebro” de la denuncia de Nisman contra Cristina.
El requerimiento que se firmó el mes pasado recién se conoció ayer en fuentes judiciales. Paralelamente, la fiscal del fuero penal ordinario, Viviana Fein, recibió los informes de los peritos oficiales y de los peritos de parte sobre cómo murió Nisman y en los próximos días deberá decidir si cambia la carátula del expediente. La de Marijuán y el juez federal Rodolfo Canicoba Corral es una causa paralela a la investigación por la muerte de Nisman.
Carrió y su colega de bancada, Fernando Sánchez, habían denunciado un supuesto plan para “relajar” la custodia de Nisman en la que habrían afirmado que inclu- yó una reunión entre Milani y un militar retirado que es hermano de uno de los jefes de custodias de la Federal. Aníbal Fernández negó los cargos y afirmó que denunciará a Carrió.
Lo cierto es que los custodios que estaban asignados el día de le muerte del fiscal de la AMIA tardaron 11 horas en avisar a sus jefes que ocurría algo raro en el departamento, fueron y vinieron dos veces a buscar a la madre de Nisman y se contradijeron en cuanto a los movimientos y las horas de los acontecimientos de ese día clave.
“Los custodios nada hicieron para repeler cualquier riesgo inminente que pudiera estar amenazando al fiscal”, quien iba a dar el 19 de enero nuevos datos al Congreso sobre su denuncia de encubrimiento de los iraníes acusados de ser los autores intelectuales del atentado contra la AMIA de 1994. Además, Nisman había sido objeto de una “fatwa” (una orden religiosa de muerte) por parte de un sector extremista islámico de Irán.
En cuanto, a Fernández y Berni, denunciaron un “plan de entorpecimiento” de la investigación que va desde la presencia del secretario de Seguridad el 18 de enero en el departamento de Nisman sin autorización judicial a una serie de declaraciones para presionar a Fein.
A criterio de Carrió y Sanchez hubo una “zona liberada” gracias a esas actividades, más la falta de funcionamiento de la cámara de seguridad de un ascensor, la desactualización del ingreso e egreso de personas a Le Parc, a cargo de la empresa privada Seguridad Integral Empresaria.